MELBOURNE (AP) — La policía acusó el lunes a tres hombres tras una invasión violenta a la cancha, que dejó lesionados a un arquero y un árbitro y que obligó a que el partido de la primera división australiana entre dos conjuntos de Melbourne se suspendiera el fin de semana.
Distintos videos mostraron a un hombre que lanzó un balde metálico, lleno de arena, contra Tom Glover, arquero del City, durante la trifulca del sábado por la noche en el AAMI Stadium.
Glover fue retirado de la cancha, con una hemorragia. Fue necesario suturarle una laceración en el rostro.
El lunes, había vuelto a los entrenamientos con su club.
Unas 150 personas irrumpieron en el terreno cuando habían transcurrido unos 20 minutos del partido que el City ganaba por 1-0 al Victory.
La policía estatal de Victoria revisó los videos de seguridad antes de pedir ayuda del público para identificar a ocho personas buscadas con fines de interrogatorio. Tres hombres, de 23, 19 y 18 años, se presentaron posteriormente en cuarteles locales de la policía y fueron acusados de varios delitos.
Los tres salieron libres bajo fianza y comparecerán en la Corte de Magistrados de Melbourne en febrero.
Un hombre de 23 años, acusado de lanzar el balde contra Glover, enfrenta cargos de desorden violento, arrojar un proyectil, agresión ilícita, desorden público y provocar disturbios.
Los dos adolescentes fueron acusados de delitos relacionados con la agresión contra el portero y el árbitro.
Grupos de aficionados rivales habían lanzado bengalas a la cancha, y la situación empeoró cuando una de éstas pareció golpear a un camarógrafo de la TV. Glover recogió luego una bengala del campo y la lanzó de vuelta al graderío.
Fue entonces cuando los hinchas invadieron la cancha. Glover fue alcanzado por el balde con arena, que se usa para apagar incendios.
La Asociación de Fútbol de Australia ha prometido imponer castigos ejemplares a quienes resulten responsables, y ha ordenado que el Victory explique lo ocurrido a fin de no enfrentar sanciones graves por la conducta de sus seguidores.
El Victory podría ser castigado con multas, pérdida de puntos o el veto de sus aficionados en los estadios.
Los hechos empañaron un momento de entusiasmo para el fútbol australiano, dos semanas después de una buena actuación de la selección nacional en la Copa del Mundo. Australia llegó a los octavos de final, donde dio pelea antes de caer por 2-1 ante Argentina, el eventual campeón.