MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Un tribunal de Bielorrusia ha iniciado este martes un juicio contra Tijanovskaya, la principal rival del presidente Lukashenko en las elecciones de 2020, y otros cuatro dirigentes opositores --entre los que se encuentra Pavel Latushka-- acusados de una batería de delitos entre los que se incluye conspiración.
Según Borrell, los cinco acusados se enfrentan a cargos "fabricados" de traición, extremismo, conspiración e incitación al odio, y se enfrentan a posibles condenas de hasta 20 años de prisión tan solo por "ejercer sus derechos democráticos".
La UE ha alertado de que estos juicios se dan después de que el régimen de Lukashenko tomara "medidas similares" hace apenas una semana contra Ales Bialiatski, último premio Nobel de la Paz, y el periodista y miembro de la junta directiva de la Unión Independiente de Polacos en Bielorrusia, Andrzej Paczobut.
En este contexto, Borrell ha alertado de que "la represión política del régimen de Lukashenko ha alcanzado un nivel sin precedentes", apuntando al respecto que a día de hoy hay "más de 1.440 presos políticos" en Bielorrusia.
"La legislación arbitraria priva a los ciudadanos de derechos fundamentales, incluida la nueva ley que permite privar de su ciudadanía a los bielorrusos que viven en el extranjero", ha añadido Borrell, quien considera que esto supone una "violación continua de los derechos y libertades de la población de Bielorrusia".
Finalmente, el máximo representante de la diplomacia europea ha trasladado la firme condena de la UE contra la "brutal represión" y los juicios políticos orientados a "silenciar cualquier voz independiente y clausurar cualquier espacio para el debate democrático".
El proceso judicial ha arrancado este martes en Minsk sin la presencia de los cinco acusados. Además de a Tijanovskaya, las autoridades bielorrusas también juzgan a Maria Moroz, Olga Kovalkova y Sergei Dilevski, vinculados al consejo opositor alternativo a Lukashenko, así como al también mencionado Latushko.
Los abogados de varios acusados han solicitado sin éxito en la primera vista interrumpir el juicio, según la agencia de noticias oficial BelTA. Tijanovskaya ha denunciado en redes sociales que se le imputan más de diez delitos, pero ha restado validez al proceso.
Para Tijanovskaya son "el dictador Lukashenko" y sus aliados quienes deberían terminar sentado en un banquillo. "Seguiremos luchando para devolver una verdadera justicia a Bielorrusia, liberar a todos los presos políticos y asegurarnos de que aquellos que han cometido delitos contra la población rinden cuentas", ha prometido en su perfil de Twitter.