MADRID, 17 (Portaltic/EP)
Microsoft Defender es un 'software' antivirus y antimalware integrado en Windows y en Microsoft 365, que se actualiza de forma periódica y que no tiene coste adicional para los usuarios de ordenadores con este sistema operativo.
Recientemente la compañía ha implementado una actualización de este servicio, que ha experimentado una serie de fallos y que ha eliminado el acceso directo a algunas aplicaciones del sistema operativo de Microsoft.
Los clientes de Seguridad de Windows --el centro para administrar las herramientas que protegen el dispositivo y otros datos-- y de Microsoft Defender for Endpoint para empresas registraron los fallos a fecha de 13 de enero, tal y ha señalado la compañía en un comunicado.
Entonces, algunos de ellos pudieron "haber experimentado una serie de falsos positivos en el asistente para la referencia de reglas de reducción de la superficie expuesta a ataques (ASR)", así como el bloqueo de llamadas a la API de Win32 desde la macro de Office.
Después de actualizar a compilaciones de inteligencia de seguridad entre 1.381.2134.0 y 1.381.2163.0, este error en la actualización dio como resultado "la eliminación de archivos que coincidían con la lógica de detección incorrecta, lo que afectaba principalmente a los archivos de acceso directo de Windows", esto es, los .ink.
En una nueva actualización, Microsoft indicó que el fallo se resolvió con una nueva compilación, la 1.381.2164.0, y que la instalación de esta o de versiones posteriores "debería evitar el problema". Sin embargo, no restaurará los accesos directos eliminados anteriormente.
De este modo, la empresa ha confirmado que los usuarios deberán "volver a crear o restaurar estos accesos directos a través de otros métodos" y ha explicado cómo hacerlo, previa descarga de la herramienta de recuperación de accesos directos.