La primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, reapareció en público luego de una cirugía a la que se sometió para extirparle “una lesión cancerosa ubicada encima del ojo derecho y otra en el pecho”, como lo indican medios internacionales.
La docente estadounidense de 71 años de edad sufrió de un carcinoma basocelular, el cual, es un tipo muy común de cáncer de piel, pero también el más curable. Se considera muy tratable, sobre todo cuando se detecta a tiempo. Es un cáncer de crecimiento lento que suele limitarse a la superficie de la piel, relató la página web de Los Ángeles Times.