MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
"Estimado señor Blinken. Entiendo que decidió dar una lección de democracia a nuestro primer ministro (Benjamin Netanyahu)", ha dicho Strock, del ultraderechista Sionismo Religioso, a través de un mensaje en su cuenta en la red social Twitter.
"La democracia es, ante todo, el deber de un país de determinar su camino según el voto de sus ciudadanos, teniendo todos el mismo peso y sin participación extranjera", ha apuntado, antes de indicar que las manifestaciones antigubernamentales, "por legítimas que sean, no son el equivalente a un voto".
Durante su encuentro con Netanyahu, Blinken hizo especial hincapié en los "valores compartidos" entre ambos países, incluido el "apoyo" de Washington a "principios e instituciones democráticas básicas, el respeto de los Derechos Humanos, una justicia igualitaria para todos y los derechos de las minorías".
En este sentido, incidió en que Estados Unidos e Israel han reforzado sus democracias durante los años a través de "mantener los estándares establecidos, hablar con franqueza y de forma respetuosa, como amigos, cuando hay un acuerdo y cuando hay un desacuerdo".
Por su parte, el ex primer ministro y líder del opositor Yesh Atid, Yair Lapid, ha apoyado las palabras de Blinken y ha destacado que durante su encuentro con el secretario de Estado estadounidense se abordaron "principalmente" los "valores compartidos, los principios de democracia y la preservación de las instituciones democráticas".
"Ha llegado el momento de que Netanyahu, con toda su debilidad, ponga al menos en su sitio a Strock", ha apuntado en Twitter. "La 'participación extranjera' de Estados Unidos de la que habla incluye 38.000 millones de dólares en ayuda, financiación para las baterías del sistema 'Cúpula de Hierro', helicópteros Apache y aviones F-35 que podrían atacar Irán", ha detallado.
La coalición gubernamental está impulsando una remodelación del aparato de justicia que incrementaría el control del Gobierno sobre el aparato judicial, lo que ha desencadenado una oleada de críticas por parte de la oposición y manifestaciones semanales para protestar contra los planes de Netanyahu y sus aliados.
