BARCELONA, España (AP) — El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, llegó el miércoles a Rabat acompañado de 11 ministros para reunirse con funcionarios del gobierno marroquí como parte de la estrategia de España para mejorar las históricamente complejas relaciones con su vecino del otro lado del Estrecho de Gibraltar.
La visita ocurre 10 meses después de que Sánchez se reuniera con el rey marroquí Mohammed VI y pusiera fin a una crisis diplomática que surgió en 2021 relacionada con el territorio disputado marroquí del Sahara Occidental. Durante esa reunión, Sánchez declaró una nueva etapa en las relaciones bilaterales con Marruecos, un importante socio de la Unión Europea en la lucha contra el extremismo y en la ayuda con las políticas bloque contra la migración no autorizada.
Sánchez viajó otra vez al sur el miércoles y asistirá a un foro de líderes comerciales de ambos países en Rabat. El jueves, se reunirá con el primer ministro Aziz Akhannouch, un empresario multimillonario que ganó las elecciones en 2021 y es considerado cercano al rey Mohammed VI.
Akhannouch recibió a Sánchez en el aeropuerto de Rabat antes de pasar revista a una guardia de honor.
La agenda de Sánchez no incluye otra reunión con el rey marroquí, con quien, el pasado mes de abril, compartió la comida iftar para romper el ayuno del día durante el mes sagrado musulmán del Ramadán como punto álgido de su reconciliación.
La presidencia de España señaló que, en lugar de eso, el presidente tuvo una conversación con el monarca en la que acordaron que la reunión entre “España y Marruecos consolidan la nueva etapa de sus relaciones bilaterales”. Agregó que Sánchez aceptó la invitación del rey para hacer otra visita oficial a Rabat en una fecha no definida.
Los marroquíes conforman la comunidad extranjera más grande de España con 800.000 residentes y los importantes lazos económicos unen a los vecinos separados por sólo 13 kilómetros (8 millas) de agua en su punto más cercano.
Sin embargo, las relaciones entre ambas naciones se vieron muy afectadas en mayo de 2021 después de que España permitiera que el líder del Frente Polisario, que ha librado una rebelión armada de baja intensidad en su intento por independizar a Sahara Occidental de Marruecos, recibiera atención médica por COVID-19 en España.
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Alicia León contribuyó a este despacho desde Madrid.
