BUENOS AIRES (AP) — El gobierno de Alberto Fernández perdió el primer round del año en la pelea por controlar la inflación que definirá en gran medida la suerte del oficialismo en las elecciones generales de octubre en Argentina.
El país sudamericano registró en enero una inflación mensual de 6% contra 5,1% de diciembre, reportó el martes el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Comparada con el mismo mes de 2022, el costo de vida se disparó 98,8%, cifra que confirma a la Argentina en la lista negra de países con mayor inflación del mundo.
Los servicios de turismo (9%); las tarifas de servicios públicos, internet, telefonía celular (8%) y combustibles (8%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (6,8%) fueron el combustible para un aumento generalizado de precios en el primer mes del año, según el reporte oficial.
Con la inflación al tope de las preocupaciones de los argentinos, el gobierno de Fernández se había propuesto como meta una paulatina desaceleración hasta 4% mensual en los primeros meses del año y así mejorar las perspectivas electorales del oficialismo de cara a la elección presidencial de octubre.
En el monitor de humor social y político que realiza cada mes la consultora D’Alessio IROL / Berensztein, la inflación aparece como el principal problema tanto para quienes se definen como votantes del oficialismo como de la oposición.
Previendo la mala noticia, el ministro de Economía, Sergio Massa, firmó en los últimos días acuerdos de precios con las grandes cadenas de supermercados y frigoríficos, medidas que los analistas consideran insuficientes para controlar la inflación.