MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Australia ha acusado este martes a Irán de tratar de espiar a ciudadanos iraníes afincados en territorio australiano tras las protestas nacionales por la muerte de Mahsa Amini.
Así lo ha afirmado la ministra del Interior australiana, Clare O'Neil, anunciando que el Ejecutivo del que forma parte sacará a la luz campañas de interferencia extranjera en Australia al nombrar públicamente a los países responsables de ellas, según ha informado la cadena ABC.
Irán ha sido el primero de los países que O'Neil ha citado, cuando ha informado de que la Organización Australiana de Inteligencia y Seguridad (ASIO, por sus siglas en inglés) impidió una operación del gobierno iraní en Australia dirigida a un iraní-australiano relacionado con las protestas.
"ASIO interrumpió las actividades de las personas que habían realizado la vigilancia de la casa de un iraní-australiano, así como una extensa investigación de este individuo y su familia", ha afirmado la titular del Interior en declaraciones a la prensa.
"Me complace decir que nuestras agencias se dieron cuenta de inmediato. ASIO rastreó la operación y la cerró de inmediato", ha añadido, según ha recogido la agencia Bloomberg.
Según O'Neil, las autoridades de Teherán trataron de vigilar el domicilio del ciudadano iraní-australiano, incluyendo la realización de investigaciones sobre sus amigos y familiares.
Ante esto, ha advertido de que Australia no se quedará "de brazos cruzados" al permitir que los australianos o los visitantes del país sean vigilados y rastreados por gobiernos extranjeros.
"Australia no tolerará actos hostiles en forma de vigilancia, acoso o intimidación contra sus ciudadanos, ha agregado la titular de la cartera de Interior.