MADRD, 14 (EUROPA PRESS)
Naciones Unidas estima que al menos 8,8 millones de personas se han visto afectadas por el seísmo en 43 distritos de Siria. En la zona noroeste, más de 1.700 edificios se han venido completamente abajo, según la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de la ONU, que resume en un informe los datos de "un desastre de proporciones colosales".
Ya antes del terremoto, los expertos estimaban que 15,3 millones de personas precisaban de asistencia humanitaria en Siria, un nivel de necesidades sin precedentes desde el estallido de la guerra hace doce años. La última emergencia no ha hecho más que complicar las cosas, por lo que las agencias internacionales han pedido ayuda para actuar ya.
El llamamiento de este martes es un primer paso, si bien únicamente cubre un periodo inicial de tres meses, hasta el mes de mayo. Entre las prioridades destacan el despliegue de maquinaria pesada, la atención sanitaria o la ayuda alimentaria --ya antes del terremoto 12,1 millones de personas pasaban hambre en Siria--.
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha reconocido que las necesidades son "inmensas". "Todos sabemos que la ayuda no está llegando a la velocidad y la escala deseadas. La magnitud de este desastre lo convierte en uno de los peores de la historia reciente", ha advertido.
Guterres ha lanzado así un "mensaje urgente" a la comunidad internacional, de la que espera una mayor implicación. También espera que la ayuda llegue "a través de todas las rutas", sin restricciones, después de que en los últimos días se hayan abierto pasos fronterizos con Turquía de manera excepcional.