BRUSELAS, 15 (EUROPA PRESS)
Los cambios, que se han aprobado con 492 votos contra 109 y 27 abstenciones, buscan impulsar la supervisión regulatoria y las salvaguardias de protección de los inversores para acelerar la aceptación de los fondos de inversión a largo plazo, también por parte de los inversores minoristas.
Esto, a su vez, debería respaldar la financiación de proyectos a largo plazo, como proyectos de infraestructura, inmobiliarios o de creación de pequeñas y medianas empresas en toda la Unión Europea (UE).
Para fomentar un mercado más dinámico, el texto amplía la posibilidad de que estos fondos se puedan invertir en empresas que cotizan en bolsa o en tecnologías financieras dentro de los cinco años posteriores a su autorización.
Además, para garantizar que los fondos se canalizan también hacia el impulso de la transición ecológica y digital, ambas se han establecido como inversiones prioritarias de estos fondos a largo plazo y se podrán invertir en bonos verdes europeos emitidos bajo los Estándares de Bonos Verdes de la UE.
