BOGOTÁ (AP) — Un grupo de 78 policías y seis trabajadores de una empresa petrolera fueron liberados el viernes tras ser retenidos desde el día anterior por un grupo de indígenas y campesinos que se manifestaban en contra de un campo petrolero en Caquetá, al sur de Colombia, confirmaron las autoridades.
La víspera, la manifestación se tornó violenta y se reportó la muerte de un policía y un civil, así como varios heridos y las decenas de policías retenidos en una casa de la comunidad.
Los hechos se registraron en el sector de Los Pozos, ubicado en San Vicente del Caguán, donde opera la empresa petrolera Emerald Energy a la que los manifestantes le han reclamado inversión social y de infraestructura por más de 40 días.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, prometió a los manifestantes atender personalmente sus reclamos y pidió a la comunidad mantener las vías de diálogo. Además, pidió investigar los homicidios y juzgar a los responsables.
"Las acciones violentas prácticamente lo que hacen es destruir la posibilidad, no solamente de tener un gobierno popular, progresista, sino los caminos mismos de la paz”, dijo el mandatario en una declaración oficial.
