MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
"Hoy tenemos una decisión fundamental de la Justicia internacional. En un caso que tiene verdadera perspectiva. El Tribunal Penal Internacional ha emitido una orden de arresto contra Putin. La decisión histórica de la que partirá una rendición de cuentas histórica", ha aseverado el Zelenski a través de un comunicado difundido por la Presidencia ucraniana.
Así, el presidente Zelenski ha incidido en que la orden de arresto sitúa a su homólogo ruso y a Lvova-Belova como "oficialmente sospechosos de un crimen de guerra", pues se les acusa de haber deportado "a miles de niños" desde los territorios ocupados por Rusia en el este de Ucrania hacia el "territorio del Estado terrorista" en el marco de una guerra iniciada hace ya más de un año.
"Ya se han registrado más de 16.000 casos de deportación forzada de niños ucranianos por parte del ocupante en procedimientos penales investigados por nuestros agentes del orden. Pero el número real y completo de deportados puede ser mucho mayor", ha advertido Zelenski, quien ha atribuido a Putin la responsabilidad final de estos supuestos delitos.
Para el mandatario ucraniano, sería "imposible" cometer una operación a tal escala sin las órdenes del "máximo líder del Estado terrorista". "Separar a los niños de sus familias, privarlos de cualquier oportunidad de contactar con sus familiares, esconderlos en el territorio de Rusia, enviarlos a regiones remotas; todo esto es una política estatal", ha aseverado.
Más allá de sus acusaciones a Putin, Zelenski ha mostrado su agradecimiento al TPI y a su fiscal jefe, Karim Khan, así como a todos aquellos que están colaborando y ayudando a Ucrania "en la lucha por la Justicia". En la misma línea, ha ensalzado la labor de los militares desplegados en el frente, especialmente a quienes combaten en escenarios de intensos enfrentamientos, como Bajmut o la región de Lugansk.
Las órdenes de arresto de este viernes representan los primeros cargos internacionales presentados desde el comienzo del conflicto y llegan después de meses de trabajo de un equipo especial de investigación a las órdenes del fiscal jefe Khan. Para su emisión ha sido necesario que un panel preliminar de jueces aceptara la validez de las pruebas presentadas.
La decisión del TPI ya había sido celebrada previamente por altos cargos de la Administración ucraniana, como el ministro de Exteriores, Dimitro Kuleba; el primer ministro, Denis Shmigal; o el jefe de la Oficina de la Presidencia, Andriy Yermak. Todos han coincidido en la importancia de la orden de arresto, que hará que "los delincuentes internacionales rindan cuentas por robar niños, y otros delitos".