CARACAS (AP) — El presidente venezolano Nicolás Maduro y su colega colombiano Gustavo Petro revisaron el jueves la agenda bilateral y se comprometieron a dar los pasos necesarios para concretar la reapertura de consulados, que figura entre los asuntos pendientes desde que ambos líderes impulsaron el restablecimiento de las relaciones bilaterales.
La lucha conjunta contra el narcotráfico y la próxima cumbre de países de la región, que se realizará en el marco de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), también fueron algunos de los temas tratados por los presidentes durante su encuentro, indicó la Presidencia de Colombia en un comunicado divulgado en Bogotá.
Maduro indicó en su cuenta de Twitter que se trató de una “productiva y cálida” reunión y que ambos buscaron “profundizar las alianzas" entre ambos países. No hubo una declaración conjunta, ni comentarios de los gobernantes.
Con la elección de Petro —el primer mandatario de tendencia izquierdista en Colombia— se restablecieron las relaciones diplomáticas y comerciales con Maduro, a quien su antecesor Iván Duque (2018-2022) tildaba de “dictador”. Para Petro, que asumió la presidencia el 7 de agosto de 2022, fue el cuarto encuentro con Maduro desde entonces.
Ese restablecimiento de relaciones diplomáticas y la reapertura de la frontera tras años de cierre ha sido paulatino.
En un informe que tituló “Luces y sombras del restablecimiento de relaciones con Venezuela” divulgado el jueves, la Universidad del Rosario —un conocido centro de estudios privado de Colombia— mencionó “avances” como la apertura de puentes internacionales, la designación de embajadores y el fortalecimiento de los lazos entre los gobiernos de Petro y Maduro.
Sin embargo, el documento advierte sobre la violencia que persiste en la zona fronteriza, según dice, por actores armados que están “reconfigurando su acceso a los mercados ilegales y su presencia territorial”. Consideró que urge una mayor coordinación de los cuerpos de seguridad.
El informe, además del tema de los consulados, menciona que resta el aumento de la oferta de vuelos comerciales entre los dos países, que hasta ahora cuenta con cuatro vuelos semanales a través de las aerolíneas Turpial, venezolana, y Satena, colombiana.
Señala, a su vez, que hay otros temas de la agenda bilateral que no se han tratado lo suficiente como el flujo migratorio, dado que Colombia alberga 2,4 millones de venezolanos que han salido de su país natal por la crisis política y económica.
El comercio bilateral se reanudó en septiembre pero seis meses después el intercambio de bienes y servicios sigue siendo exiguo, según los expertos.