QUITO (AP) — La periodista Karol Noroña, que publicaba información sobre las frecuentes matanzas carcelarias y las mafias que operan en Ecuador, abandonó el país tras recibir amenazas contra su vida, informó el martes el portal para el que trabajaba.
En una carta publicada en su página de internet, el medio digital GK indicó que la comunicadora dejó el país la semana pasada en medio de un operativo de emergencia luego de que se verificó la existencia de una amenaza a “su vida e integridad física, relacionada a su cobertura de la crisis carcelaria y el crimen organizado”.
Destacó que el viaje se produjo con el apoyo y respaldo de más de 10 organizaciones de derechos humanos y protección de los periodistas de todo el mundo y que ahora se encuentra en “un destino seguro, donde tiene una red de apoyo y donde permanecerá hasta que existan las garantías para su retorno”.
El medio hizo pública la situación “porque es una muestra de los riesgos que corren los periodistas en el Ecuador”. No informó de dónde provenían las amenazas.
Noroña, de 29 años, disponía constantemente de información sobre lo que ocurría en el interior de las cárceles y a menudo informaba de los problemas que ocurrían allí antes de que las autoridades se pronunciaran al respecto.
El pasado jueves la comunicadora publicó en su cuenta de Twitter que estaría alejada de las redes durante un tiempo y pidió protección para su familia al tiempo que señaló "tanta muerte y tanto riesgo. Ahora no se sabe quién es quién, tristemente”.
Fundamedios, una organización que vela por la libertad de expresión en Ecuador, expresó su solidaridad y apoyo a la periodista y condenó esos “actos atroces que son una grave violación a la libertad de expresión y prensa”. A su vez convocó a las autoridades a dar garantías al ejercicio del periodismo.
Recientemente Fundamedios reveló que entre enero y diciembre de 2022 hubo 356 agresiones a periodistas y medios de comunicación en el país, la cifra más alta desde 2018.
En los últimos cuatro años las brutales matanzas en las cárceles de Ecuador, causadas por disputas entre grupos del crimen organizado por rutas y zonas de distribución de drogas, han dejado un saldo de más de 400 víctimas mortales.
