MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El caso ha captado la atención internacional después de que haya trascendido que en abril de 2022 la niña, Masha, que tenía doce años, realizó dibujos contra la guerra en Ucrania cuando los profesores le pidieron que pintase algún tipo de homenaje a las Fuerzas Armadas rusas.
El centro llamó a la Policía y dio un primer toque al padre, que comenzó a ser señalado y ahora ha hecho frente a un juicio en el que las autoridades le han acusado de publicar mensajes ofensivos en Internet. Moskaliov logró escapar del arresto domiciliario, por lo que se encontraría huido.
"No importa lo que ocurra. Estamos juntos", le ha trasladado la niña, en una carta publicada en Facebook por su abogado, Dimitri Zajatov, y en la que insta a su padre a no "rendirse" y se declara "orgullosa" de él. Le pide que no se preocupe y que entienda que no tiene la "culpa" de la actual situación.
El Gobierno ruso, sin embargo, se ha desmarcado del caso, alegando que se trata de una decisión judicial. El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha abogado por proteger a los niños y ha asegurado que la situación es "complicada", según la cadena estadounidense CNN.