MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El presidente de Montenegro, Milo Djukanovic, y el ex ministro de Economía Jakov Milatovic enfrentan dos modelos contrapuestos de europeísmo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en el país en medio de un resultado incierto y un futuro todavía más inseguro dada la debilidad política que atraviesa un país que lleva tres años sin formar un Ejecutivo estable.
En la primera vuelta de marzo, Djukanovic se alzó con un 35,3 por ciento de los votos, seguido de Milatovic, líder del Movimiento Europa Ahora, con un 28,9 por ciento de votos, pero los analistas prevén una carrera mucho más ajustada ahora que solo quedan los dos en liza.
Aunque Djukanovic lleva tres décadas prácticamente al frente del país, bien como presidente o como primer ministro, esta segunda vuelta podría significar la continuación de la dolorosa derrota que padeció el partido en las legislativas de 2020 en favor de una inestable coalición de tres bloques opositores.
Milatovic, de 37 años, comparece como un candidato regenerador, lejos de los escándalos de corrupción que han afectado de cuando en cuando a Djukanovic, y que presenta un modelo de relaciones internacionales, en principio, más vecinal que el del actual mandatario al apostar tanto por la integración en la UE como por el desarrollo de las relaciones con Serbia (y con Rusia, por extensión).
Djukanovic, por contra, ha buscado movilizar a los votantes de las minorías nacionales no serbias, como los albaneses y los bosnios, que lo han apoyado en el pasado, explican los analistas de la emisora pública estadounidense internacional Radio Free Liberty.
Estos comicios servirán también como prueba de cara a las elecciones parlamentarias anticipadas del 11 de junio, que supondrán un nuevo intento para consolidar gobierno después de que el mes pasado y justo antes de la primera vuelta, Djukanovic disolviera el Parlamento tras expirar el plazo de tres meses para que el primer ministro designado, Miodrag Lekic, de la Alianza Democrática liberal conservadora (DEMOS) intentara formar ejecutivo.
En agosto, el Parlamento montenegrino aprobó una moción de censura contra el Gobierno de Dritan Abazovic, quien a día de hoy sigue ejerciendo como jefe del Ejecutivo a pesar de su derrota.
La caída de Abazovic, del pequeño partido ecologista URA, se produjo precisamente tras la pérdida de apoyo por parte de Djukanovic. Desde entonces, la crisis política en el país no ha hecho más que agravarse y obstaculizar el camino, hasta el estallido de la crisis relativamente cómodo, de la adhesión de Montenegro a la UE.