BRUSELAS, 5 (EUROPA PRESS)
En rueda de prensa tras la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN con representantes de Corea del Sur, Japón, Australia y Nueva Zelanda, el secretario general aliado, Jens Stoltenberg, ha asegurado que el envío a Rusia de material militar letal en el contexto de la guerra en Ucrania, tendrá "graves consecuencias" y sin querer detallar la respuesta que daría la OTAN, ha dicho que varios aliados ya han expresado esta advertencia y que las autoridades chinas saben las implicaciones que tendría este paso.
Stoltenberg ha explicado, eso sí, que la alianza atlántica no tiene hasta ahora confirmación de que Pekín haya entregado armas a Moscú para su campaña militar en Ucrania, pero ha indicado que sigue de cerca la situación.
En este sentido, ha reiterado los recelos hacia el papel de China recordando que Pekín no ha condenado la invasión de Ucrania, apoya a la economía rusa frente a las sanciones internacionales y que el presidente chino, Xi Jinping, y el presidente ruso, Vladimir Putin, firmaron un acuerdo de amistad sin límites semanas antes de que Moscú lanzara el ataque conta el país vecino.
En el día en el que la OTAN se ha reunido con sus socios en el área del pacífico, el ex primer ministro noruego ha insistido en las repercusiones globales de la guerra rusa en Ucrania y ha defendido la unidad de la OTAN y la relación con socios afines frente a la presión que someten Moscú y Pekín contra el orden mundial.
Los socios asiáticos y oceánicos de la OTAN comparten la preocupación por el papel internacional de China y al igual que los aliados, ven con recelo aspectos del modelo chino como la inversión militar, la represión de minorías, la situación del mar del sur de la China o el uso de medios sociales para la vigilancia de su ciudadanía.
Después de que los líderes de estos asiáticos y oceánicos participan en la cumbre de Madrid del pasado verano, la OTAN ha vuelto a extender la invitación para la reunión de Vilnia del próximo julio. La organización militar ya señaló a China como un desafío en su concepto estratégico de 2022.
Este mensaje llega en medio del carrusel de viajes de líderes a China para tratar la cuestión de Ucrania, con la propuesta de doce principios de Pekín para poner fin al conflicto que la Alianza Atlántica critica como "equidistante" y lamenta que no tiene en cuenta las demandas de Ucrania.
En la reunión de los aliados ha participado el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, que ha pedido que el bloque europeo mantenga una "relación constructiva" con China para abordar desafíos globales, como la cuestión climática.
"La UE se ha comprometido a mantener una relación constructiva con China para resolver retos mundiales. Necesitamos a China para resolver los desafíos globales, y queremos desarrollar un enfoque constructivo con China", ha asegurado, como contapunto a las reticencias expresadas por la OTAN.