MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
En un primer momento, el portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Philip Ventura, confirmó a la agencia de noticias kurda Rudaw que un convoy estadounidense fue atacado por un avión no tripulado cuando circulaba por la ciudad de Solimania, capital homónima de la provincia, sin víctimas que lamentar.
Después, fuentes oficiales estadounidenses aseguraron al 'Wall Street Journal' que Abdi viajaba en ese convoy mientras las FDS desmentían la información previa del ataque como una "falsa noticia", divulgada por motivos políticos. "El comandante está de servicio", ha asegurado el principal portavoz de las FDS Farhad Shami.
El propio comandante Abdi confirmó el ataque contra el convoy -- ocurrido en torno a las 16.20 de la tarde del viernes, hora local, en los alrededores del aeropuerto de la ciudad -- pero no ha realizado comentarios sobre su presencia allí.
CRUCE DE ACUSACIONES
El intento de asesinato ha desencadenado un cruce de acusaciones que ponen de manifiesto la compleja realidad del Kurdistán.
El Gobierno regional del Kurdistán, para empezar, ha acusado a la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK), gran rival del Partido Democrático del Kurdistán (PDK), principal formación del Gobierno kurdo-iraquí, de estar detrás del atentado, pero fuentes estadounidenses del 'WSJ' apuntan incluso que Turquía, que considera a las Fuerzas Democráticas Sirias como una organización vinculada al terrorismo, podría haber estado detrás del ataque.
"Esta situación tan peligrosa es el resultado de la ocupación" de la Unión Patrótica del Kurdistán en la provincia de Solimania, que está bajo su control "y el uso que hacen de ella para sus actividades ilegales", ha denunciado el portavoz del Gobierno del Kurdistán iraquí y miembro del PDK, Jotiar Adil, quien ha recordado la larga historia de tensión entre ambas formaciones, y que va en aumento conforme se acercan las elecciones.
Por contra, el líder de la Unión Patriótica del Kurdistán, Bafel Talabani, ha negado toda responsabilidad en el ataque, que ha condenado en su cuenta de Twitter. "La destrucción de la paz regional y de la ciudad de Solimania es una 'línea roja'", ha aseverado. El viceprimer ministro kurdo y máximo representante de la Unión en el Gobierno, Qubad Talabani, ha reprochado a Adil que, aun siendo portavoz, "ha hablado en nombre de su partido y en modo alguno puede manifestarse por el Gobierno al completo".
Por su parte, la Presidencia del Kurdistán iraquí ha llamado este sábado a la "contención". "En lugar de echarnos la culpa entre nosotros deberíamos eliminar los motivos que nos han llevado a esta situación. No vamos a arriesgar la prosperidad de la región por motivo alguno", según ha avisado en comunicado recogido por Rudaw.
Las fuentes del 'WSJ' no elaboran sobre la posible implicación de Turquía -- que percibe a las FDS como el "ala siria" el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, considerada por Ankara como una organización terrorista -- pero Rudaw recuerda que el Gobierno turco ha prohibido durante tres meses los viajes en avión al aeropuerto de Solimania ante la posibilidad de atentados.
"El Partido de los Trabajadores del Kurdistán", dijo este pasado miércoles el portavoz de la Presidencia turca, Ibrahim Kalil, "está muy presente en Solimania y no vamos a ignorar esta situación".