BUENOS AIRES (AP) — La empleada de Boca Juniors que denunció al exentrenador del equipo de fútbol femenino por un presunto abuso sexual aseguró el miércoles que no fue la única víctima y lamentó la falta de apoyo del club argentino.
“No soy la única, hoy puedo hablar por mí. Me costó más de un año poder hacerlo públicamente. Pero no soy la única”, dijo Florencia Marco, jefa de prensa del plantel profesional de mujeres de Boca, tras presentarse en los tribunales para interiorizarse sobre la marcha de la causa judicial que inició contra el entrenador Jorge Martínez.
Marco denunció ante una fiscalía a Martínez, de 49 años, por episodios de acoso físico y verbal presuntamente ocurridos en 2022. Boca Juniors desplazó al entrenador la semana pasada tras hacerse pública la denuncia.
La jefa de prensa, que está de licencia, no identificó a las otras supuestas afectadas.
“No es fácil afrontar toda esta situación y exponerlo. Hay miedo, hay vergüenza, hay un montón de situaciones que las tiene que trabajar cada uno”, comentó la mujer.
Marco criticó a la directiva de Boca porque no intervino en el caso el año pasado, cuando denunció a Martínez ante el Departamento de Igualdad e Inclusión del club a la espera de que se aplique un protocolo para estos casos.
“Lamentablemente se corrió a la persona del puesto estando con mujeres y menores una vez que se hizo público”, señaló Marco. "Durante un año estuve hablando con todas las personas tratando de prevenir que no siga pasando a otras mujeres y cuando no tenía respuesta hice la denuncia interna y al no tener respuestas, porque seguían pasando cosas, tuve que tomar esta instancia judicial”.
Marco dijo que hasta el momento ningún directivo del club se comunicó con ella.
Medios deportivos locales reportaron el miércoles que la exfutbolista Florencia Quiñones asumirá como entrenadora de las “Gladiadoras”, apodo del equipo femenino, en reemplazo de Martínez.