MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Asimismo, el texto incluye otra serie cláusulas que podrían suponer la retirada de la ciudadanía, como son delitos contra la integridad territorial rusa, deserción, o llamamientos para desencadenar una guerra dentro del país.
Llevar a cabo acciones que supongan "una amenaza para la seguridad nacional" de Rusia también será motivo suficientes para analizar la retirada de la ciudadanía, competencia que pasa a formar parte del Ministerio del Interior, y no de un tribunal, como hasta ahora, tal y como recogido la agencia de noticias TASS.
La nueva decisión del Parlamento ruso se suma a la serie de legislaciones aprobadas desde la invasión de Ucrania en febrero de 2022 para blindar a las Fuerzas Armadas y la imagen que proyectan, pues ya existen varias legislaciones que castigan cuestionar el papel de las mismas en el conflicto y la guerra misma.