MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Para el dirigente opositor, que ha comparecido ante la prensa en la ciudad estadounidense de Miami tras su controvertida llegada y posterior expulsión de Colombia, el procedimiento debería ser a la inversa, de tal manera que los primeros pasos los dé Maduro, en cuya "buena voluntad" no confía en ningún caso.
En este sentido, ha pedido la reanudación del proceso de diálogo que arrancó en México en noviembre y un calendario claro hacia elecciones "libres", así como mecanismos que permitan encarar con "credibilidad" dicho proceso. Sólo entonces ve factible levantar los castigos, una herramienta que Guaidó ha considerado esencial durante estos últimos años para evitar "el deslave humanitario".
El expresidente de la Asamblea Nacional venezolana cree que Estados Unidos ha sido "transparente" en relación a este tema, advirtiendo de que no habrá ningún cambio en la política de sanciones hasta que haya "avances en la democracia" en el país sudamericano.
Guaidó, que viajará la próxima semana a Washington para seguir con su agenda de reuniones --no ha confirmado ningún encuentro con la Administración de Joe Biden--, ha explicado ante los medios que se mantiene en "constante comunicación" con los "países aliados", entre los que también ha aludido a gobiernos europeos y a la UE.
Su deseo, en cualquier caso, es volver a Venezuela "lo antes posible", aunque para ello ha reclamado "protección". Ha explicado que cruzó a Colombia porque se sentía "en riesgo" y no quería entregar otro "rehén" al régimen de Maduro, pero ha sugerido que quiere seguir formando parte del proceso de primarias para elegir un candidato opositor común para las futuras elecciones.
Guaidó, precandidato de Voluntad Popular, ha abogado por la unidad para hacer frente al chavismo y ha advertido de que "no puede ser Maduro quien determine los candidatos" que le harán frente haciendo uso de tácticas de "persecución" y de "amenazas". "Queremos estar en terreno luchando por la libertad", ha proclamado.
CRÍTICAS A PETRO
El dirigente opositor venezolano se ha mostrado crítico en las últimas semanas con la posición del Gobierno colombiano, encabezado por el presidente Gustavo Petro, que desde su llegada al poder ha recompuesto las relaciones con Maduro. Estas críticas se han recrudecido tras su controvertida salida de Venezuela, después de que las autoridades colombianas ordenasen su salida.
Petro, según Guaidó, "se puso de lado de la dictadura, no de los perseguidos políticos". Le ha reprochado que en las varias veces que ha visitado Caracas como presidente no tuviese "un minuto" para reunirse con víctimas de Derechos Humanos" y que, ahora, su ministro de Exteriores, Álvaro Leyva, "mienta".
Guaidó ha afirmado que el canciller colombiano "miente" cuando le acusa de tener otro billete comprado antes de cruzar la frontera para irse a Estados Unidos --"el único pasaje que compré es de Cúcuta a Bogotá, el cual no pude abordar", ha dicho-- y ha asegurado que llegó a Colombia "caminando por un puente".
Sin embargo, no ha entrado en más detalles sobre su salida. "Debo proteger a quienes me llevaron" a la frontera, porque si sus nombres se hiciesen públicos "van presos mañana", ha advertido Guaidó.
Sobre su interés en implicarse en la conferencia internacional organizada por Petro para hablar de Venezuela, y a la que estaban invitados delegaciones de Estados Unidos y la Unión Europea, ha afirmado que sólo quiere que "se escuche" a la oposición: "No permitieron que se escuchara mi voz en Colombia".