UAGADUGÚ, Burkina Faso (AP) — Un gran número de extremistas islámicos atacaron al ejército de Burkina Faso en el este del país y mataron a 33 soldados, dijo el ejército el viernes.
El asalto, que dejó también una docena de heridos, ocurrió el jueves en Ouagarou, una localidad de la provincia de Gourma, explicó el comunicado.
“Durante un combate especialmente intenso, los soldados del destacamento mostraron una determinación encomiable al enfrentar a un gran número de enemigos", apuntó la nota, que añadió que en la ofensiva murieron 40 yihadistas.
Desde hace siete años, combatientes ligados a Al Qaeda y al grupo extremista Estado Islámico libran una violenta insurgencia en el país. La violencia se ha cobrado la vida de miles de personas y dejó unos dos millones de desplazados.
Además, ha dividido a una nación otrora pacífica y alimentó una frustración que derivó en dos golpes de Estado el año pasado. El líder de la nueva junta militar, el capitán Ibrahim Traoré, ha prometido mejorar la seguridad del país. Pero muchos civiles dicen tener miedo también de las fuerzas de seguridad, a las que acusan de asesinatos extrajudiciales y la desaparición de un número incalculable de personas acusadas de apoyar a los insurgentes.
Mientras, los ataques se intensifican y se extienden mientras los yihadistas aíslan pueblos e impiden que cientos de miles de personas se muevan libremente.
A principios de mes, pistoleros mataron a al menos 40 efectivos de las fuerzas de seguridad del país en el norte del país y dejaron docenas de heridos.
Los residentes han acusado a las fuerzas de seguridad de asesinar de forma brutal a civiles en el norte.
Naciones Unidas ha pedido una investigación exhaustiva e independiente sobre lo que calificó como una “horrible matanza de civiles”.