JERUSALÉN (AP) — El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos pronunció el lunes un discurso ante el parlamento israelí, un honor inusual conferido al político republicano de mayor nivel en momentos de tensiones entre el gobierno israelí y la administración del presidente demócrata Joe Biden.
El titular de la cámara Kevin McCarthy y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu han calificado el discurso como prueba de que el apoyo a Israel sigue fuerte entre los dos grandes partidos estadounidenses, en momentos en que Israel marca los 75 años desde su fundación. Los críticos sostienen que el inusual honor conferido a McCarthy — es apenas la segunda vez que un titular de la cámara baja norteamericana habla ante el Knéset, después de Newt Gingrich en 1998 — es una ofensa al presidente Joe Biden, que es demócrata.
McCarthy habló ante el Knéset, recibiendo aplausos y una ovación de pie, el día en que los parlamentarios regresaban de su receso. Se prevé que ahora reanuden el debate sobre el controversial plan del gobierno de reformar el sistema judicial.
El plan ha dividido a la sociedad israelí y ha provocado una inusual crítica pública por parte de Biden. En medio de las tensiones, Biden hasta el momento no ha invitado a Netanyahu a la Casa Blanca, una invitación normalmente rutinaria después de que un primer ministro israelí es elegido.
En un desafío a Biden, McCarthy expresó el lunes que espera que la Casa Blanca “invite al primer ministro para una reunión, especialmente con motivo del 75to aniversario” de la fundación de Israel. Indicó que invitará a Netanyahu a hablar ante el Congreso si Biden no lo hace.
Es también señal de la transformación gradual de Israel, de un tema que goza de apoyo bipartidista en Estados Unidos a uno más divisivo. Esa tendencia se remonta una década, de cuando Netanyahu empezó a tomar partido por los republicanos abiertamente. Al mismo tiempo, la nueva generación de demócratas en Estados Unidos se ha vuelto más crítica hacia Israel, especialmente en cuanto a sus críticas hacia los palestinos.
McCarthy se dirigió al Knéset en momentos en que tanto republicanos como demócratas se preparan para la campaña electoral, con miras a las elecciones del 2024. Los republicanos ansían proyectarse como fuertes defensores de Israel, especialmente para atraer a los cristianos evangélicos.
McCarthy y Netanyahu se reunieron en persona antes del discurso en el Knéset, y McCarthy alabó generosamente al líder israelí, afirmando que su “liderazgo, carácter y coraje” inspiran a Estados Unidos. Netanyahu declaró que el parlamento israelí le da la bienvenida a McCarthy “con brazos abiertos”.
McCarthy aseveró que Estados Unidos “aprecia el vínculo inquebrantable” entre los dos países, prometió seguir dando fondos para la defensa de Israel y dijo que los dos países “deben mantenerse firmes en su compromiso de que Irán nunca obtenga un arma nuclear”.
Antes del receso parlamentario, Netanyahu hizo una pausa a la reforma judicial ante enormes protestas callejeras, una huelga laboral y amenazas de reservistas de no presentarse a sus deberes militares. Biden entró en la controversia, afirmando que Netanyahu “no puede continuar por este camino”.
—— Goldenberg reportó desde Tel Aviv, Israel.