BRUSELAS, 3 (EUROPA PRESS)
Bruselas pretende que estos fondos sirvan de incentivo para que las empresas del sector de la Defensa tomen medidas para reforzar la capacidad de producción e inviertan en su cadena de suministros. Todo con la idea de reducir los tiempos de entrega de pedidos y facilitar la financiación necesaria para que la industria militar europea fabrique más y más rápido.
"Es necesario impulsar la base industrial para cambiar el paradigma y que la industria de la Defensa pase a un modo de economía de guerra entre comillas", ha argumentado el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, en rueda de prensa desde la capital europea.
Se trata de la tercera pata del plan aprobado el pasado marzo por la UE para proveer a Ucrania de munición de artillería de los arsenales propios y para realizar compras conjuntas, dos propuestas que recibirán 1.000 millones de euros de fondos europeos cada una a través del Mecanismo de Paz Europeo. Junto con esta medida, los Veintisiete esperan llegar al compromiso alcanzado con Kiev para facilitar un millón de disparos de artillería.
Según reconoce la propuesta comunitaria, la actual capacidad de fabricación y las cadenas de suministro y de valor existentes no garantizan la entrega de material militar para cubrir las necesidades de los Estados miembros tanto para sus propias necesidades de seguridad como para seguir apoyando a Ucrania en el contexto de la guerra.
El nuevo instrumento busca reforzar la base industrial europea para aumentar la capacidad de un sector pensando para tiempos de paz y que actualmente atiende a una demanda modesta y que, como resultado ha provocado que los ejércitos europeos cuenten con stocks mínimos y compren material fuera de la UE.
BRUSELAS PERMITIRÁ USAR FONDOS DE COHESIÓN PARA DEFENSA
Los fondos que pone ahora sobre la mesa Bruselas provienen del mecanismo de compras conjuntas de la Agencia Europea de Defensa (EDA, por sus siglas en inglés), 240 millones de la iniciativa de compras conjuntas lanzada el pasado año, mientras que el resto saldrá de distintas partidas del Fondo Europeo de la Defensa, el presupuesto comunitario dedicado a la Defensa europea.
El objetivo es que estas partidas contribuyan a movilizar inversiones a nivel privado y de los Estados miembros, por lo que Bruselas espera que el plan para elevar la producción militar en Europa llegue a 1.000 millones. Para ello, el Ejecutivo comunitario facilitará redirigir fondos de otras partidas como fondos de Cohesión y de recuperación económica tras el coronavirus.
La lógica es usar todos los recursos posibles para financiar al sector de la Defensa "en un tiempo de guerra en Europa". "Todos tenemos que participar en este esfuerzo", ha señalado el comisario francés.
El Ejecutivo europeo usará indicadores para evaluar el impacto de la medida, de tal forma que se pueda medir el aumento de la capacidad de producción, la reducción de los tiempos en los pedidos, además del número de nuevas cooperaciones transfronterizas con empresas establecidas en otro Estados miembros o países asociados.