MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
De este modo, la tasa de inflación subyacente experimentó en abril su primer signo de moderación en términos interanuales desde junio de 2022, después de encadenar nueve meses consecutivos sin ofrecer síntomas de desaceleración y presionando al Banco Central Europeo (BCE) a seguir endureciendo su política monetaria.
Entre los países de la zona euro cuyos datos estaban disponibles, los niveles de inflación subyacente más elevados se registraron en abril en Eslovaquia (11,4%); Croacia (9,3%); Países Bajos (7,9%) y Grecia (7,2%), mientras que sólo Chipre (4%), Francia (4,7%) y Finlandia (4,9%) registraron lecturas por debajo del 5%.
En cuanto a la tasa de inflación general, la lectura interanual para la zona euro se aceleró una décima en abril en comparación con el mes anterior, alcanzando así el 7%, frente al 6,9% del mes de marzo.
Según los datos preliminares publicados por Eurostat, en el mes de abril la energía registró un alza interanual del 2,5%, después de la bajada del 0,9% del mes anterior, mientras que el precio de los alimentos alivió su escalada al 10% desde el 14,7%.
En el caso de los servicios, los precios subieron en abril un 5,2% interanual, una décima más que en marzo, pero los bienes industriales no energéticos se encarecieron un 6,2%, cuatro décimas menos que en marzo.
Entre los países cuyos datos estaban disponibles, los incrementos de precios menos intensos se observaron en Luxemburgo (2,7%), seguido de Bélgica (3,3%) y de España y Chipre (ambos 3,8%).
Por el contrario, las subidas de precios más acusadas se registraron en Letonia (15%), por delante de Eslovaquia (14%), así como de Lituania (13,35) y de Estonia (13,2%).