MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se convertirá este viernes en el sexto presidente de la democracia en visitar la Casa Blanca, una tradición que inició Adolfo Suárez y que solo no tuvo ocasión de mantener Leopoldo Calvo Sotelo, quien estuvo menos de dos años en el cargo.
La visita de Sánchez llega en la recta final de su mandato y ha venido precedida por un deshielo en la relación con Washington a raíz de la elección del demócrata Joe Biden, ya que mientras estuvo Donald Trump en la Presidencia las relaciones bilaterales al más alto nivel se vieron claramente reducidas.
El jefe del Ejecutivo seguirá pues la estela que inició en abril de 1977 Adolfo Suárez, quien repitió en 1980, reuniéndose en ambas ocasiones con Jimmy Carter. Leopoldo Calvo Sotelo no tuvo ocasión de viajar a Washington ni de recibir a ningún mandatario estadounidense mientras estuvo en el cargo, entre febrero de 1981 y diciembre de 1982.
El primer presidente socialista, Felipe González, fue invitado a la Casa Blanca por Ronald Reagan apenas seis meses después de tomar posesión, en junio de 1983. A esa visita seguirían otras tres, dos de ellas con George Bush como presidente (octubre de 1989 y abril de 1992) y otra ya con Bill Clinton al frente de Estados Unidos, en diciembre de 1994.
AZNAR, SEIS VISITAS
Su sucesor, José María Aznar, es hasta el momento el presidente del Gobierno que más veces ha sido invitado a visitar Estados Unidos por un presidente de este país. El presidente del PP visitó por primera vez la Casa Blanca en abril de 1997, menos de un año después de llegar al cargo. Entonces, fue Clinton quien le recibió, repitiendo este gesto en abril de 1999.
Sin embargo, sería con George W. Bush, hijo del 43 presidente de Estados Unidos, con el que entablaría un particular 'idilio'. El presidente republicano inició en España su primera gira europea en junio de 2001, menos de seis meses de llegar al cargo, entablando así una amistad que se mantuvo en el tiempo. En noviembre de 2001, dos meses después del 11-S, Aznar sería recibido en la Casa Blanca.
A esa primera visita siguió otra en diciembre de 2002 y otra más en mayo de 2003, durante la que tuvo ocasión de agradecer personalmente a Bush la inclusión de Batasuna en la lista de organizaciones terroristas estadounidenses. La visita de 'despedida' se produjo en enero de 2004.
La estrecha relación entre Aznar y Bush quedó de manifiesto también por el hecho de que fue invitado por el presidente estadounidense en mayo de 2002 a Camp David, residencia de descanso de los inquilinos de la Casa Blanca, y en febrero de 2003 a su rancho familiar en Crawford, Texas.
ZAPATERO SOLO UNA VISITA, RAJOY DOS
La llegada del socialista José Luiz Rodríguez Zapatero en marzo de 2004 y su decisión de retirada de las tropas españolas de Irak provocó una etapa de distanciamiento que finalmente quedó superada con su visita de octubre de 2009 a invitación de Barack Obama, quien había llegado a la Casa Blanca en enero de ese año.
El predecesor de Sánchez, Mariano Rajoy, tuvo ocasión de visitar dos veces la Casa Blanca en sus seis años y medio al frente del Gobierno. La primera de ellas se produjo por invitación de Obama en enero de 2014, ante quien aseguró que la independencia de Cataluña "no se va a producir". Rajoy tuvo ocasión de regresar a la Casa Blanca, ya con Donald Trump como presidente en septiembre de 2017.
La lejanía ideológica entre Sánchez y Trump hizo que mientras el republicano estuvo como presidente no se buscara un encuentro entre ambos. La victoria de Biden, más próximo en sus ideas y políticas al Gobierno de coalición en España, generó la expectativa de un rápido deshielo.
Tras un contratiempo inicial, dado que el primer 'encuentro' anunciado por Moncloa quedó en un breve saludo de apenas unos segundos durante la cumbre de la OTAN en Bruselas en junio de 2021, la visita de Biden a Madrid con motivo precisamente de otra cumbre de la Alianza Atlántica supuso un punto de inflexión en la relación, con reunión incluida en Moncloa.
VISITAS DE PRESIDENTES DE EEUU A ESPAÑA
Por otra parte, todos los presidentes estadounidenses desde Richard Nixon han realizado alguna visita a España durante su mandato, con la excepción de Trump. El primero en viajar fue Dwight Eisenhower, quien en 1959 se reunió con Franco, como también hizo Nixon en 1970 y Gerald Ford en 1975, meses antes de la muerte del Caudillo.
Tras la Transición, fue Jimmy Carter el primer presidente estadounidense en realizar una visita oficial a España, con encuentros tanto con González como con Juan Carlos I en junio de 1980. Ronald Reagan fue hasta la fecha el único mandatario que ha realizado una visita de Estado a España, en mayo de 1985.
El siguiente inquilino de la Casa Blanca, George Bush, viajó a España pero no lo hizo con carácter bilateral, sino para participar en la conferencia de paz sobre Oriente Próximo de 1991 auspiciada por el Gobierno de Felipe González, a la que también participó el entonces presidente de la URSS, Mijail Gorbachov. Entonces, tuvo lugar una cena a cuatro entre los tres mandatarios y Juan Carlos I.
Por su parte, Bill Clinton se desplazó en dos ocasiones a España. La primera de ellas en 1995 para asistir a una cumbre de la Unión Europea. En 1997, el presidente estadounidense regresó para pasar unos días de vacaciones junto a los Reyes en Palma de Mallorca, asistir a la Cumbre de la OTAN en Madrid y visitar Granada.
Pese a la estrecha relación que llegó a forjar con Aznar, George W. Bush solo visitó en una ocasión España, en junio de 2001, menos de cinco meses después de asumir el cargo. En aquella ocasión, el presidente del Gobierno llevó a Bush a la finca Quintos de Mora, en Toledo, que fue definida por la prensa estadounidense como "el rancho de Aznar".
Su sucesor, Barack Obama, hizo lo propio también con una única visita oficial en julio de 2016, ya con Felipe VI como Rey y con Mariano Rajoy en Moncloa.
Pese a que Rajoy sí que se reunió con Trump en la Casa Blanca, este no llegó a desplazarse a España en sus cuatro años de mandato, algo que sí hizo Joe Biden el pasado mes de junio. El mandatario aprovechó la Cumbre de la OTAN en Madrid para realizar una visita oficial con sendos encuentros con el Rey y con Sánchez.