VIENA (AP) — Irán ha resuelto dos investigaciones pendientes del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), según un informe al que tuvo acceso The Associated Press el miércoles.
El informe trimestral confidencial del OIEA con sede en Viena dice que los inspectores ya no tenían preguntas sobre las partículas de uranio enriquecidas al 83,7% en sus instalaciones subterráneas de Fordo.
“El organismo informó a Irán, después de evaluar los datos, que la información provista no era incongruente con la explicación de Irán... y que el organismo no tenía más preguntas sobre el asunto en esta etapa”, agrega el informe.
Los investigadores han concluido su investigación de rastros de uranio artificial hallados en Marivan, cerca de la ciudad de Abadeh, unos 525 kilómetros (325 millas) al sureste de Teherán, dice el informe. Los analistas habían vinculado a Marivan con el programa militar nuclear y lo habían acusado de realizar ensayos con explosivos a principios del 2000.
Según el informe, “otro Estado miembro” operaba una mina en la zona en las décadas de 1960 y 1970 bajo el régimen del sha Mohammed Reza Pahlevi. No estaba claro en principio cuál era ese país.
Irán había argumentado que los rastros de uranio provendrían de “instrumentos y equipos de laboratorio” utilizados por los mineros en el lugar. El OIEA dijo que la respuesta era “una explicación posible”.
“El organismo en este momento no tiene preguntas adicionales sobre las partículas de uranio agotado detectadas en Marivan, y el asunto ya no está pendiente en este momento”, afirmó. El organismo instaló instrumentos de detección de enriquecimiento en Fordo y Natanz, la otra instalación principal de enriquecimiento, según el informe.
