CHICAGO (AP) — En lo que se refiere al béisbol y la inclusión de la comunidad LGBTQ+, Billy Bean suele recordar los días en que jugaba.
Terminó su carrera sin contarles a sus padres sobre su vida como un pelotero gay que no salía del armario. Ocultaba su secreto a compañeros como Brad Ausmus y Torey Lovullo.
Ahora, dice que se lamenta por no haber compartido “como era plenamente”.
Es un mensaje que Bean ha transmitido en clubhouses y que encuentra eco con los peloteros actuales, concentrados en mantenerse a toda costa en las Grandes Ligas y en ser percibidos como buenos compañeros. Es también la lente a través de la cual Bean mira los asuntos actuales del béisbol y la gente LGBTQ+.
“Hay algunas partes de mi trabajo en las que me siento ciertos días como si estuviera flotando”, dijo Bean, vicepresidente de las Grandes Ligas para la diversidad, la equidad y la inclusión. “Luego, hay otros días en los que veo cierto retroceso. Eso me recuerda que tenemos 8.000 seres humanos conectados con el deporte como atletas de una forma u otra, y no vamos a lograr que siempre el 100% de esa gente coincida en lo mismo”.
Esa fricción ha sido evidente en algunas campañas recientes. Los equipos de las mayores cortejan a la comunidad LGBTQ+ durante el Mes del Orgullo, mostrando simultáneamente cuántas cosas han cambiado y cuántas siguen igual dentro del Pasatiempos Nacional de Estados Unidos, un deporte que tiene vínculos firmes con segmentos de esta nación y de América Latina donde muchos consideran la homosexualidad un pecado.
Casi 80 años después de que Jackie Robinson rompió la barrera del color en las Grandes Ligas, protagonizando un momento emblemático para los Derechos Civiles, las expresiones de apoyo a la gente LGBTQ y el rechazo a las mismas por parte de algunos grupos abren paso a la pregunta de cuándo las mayores darán la bienvenida a su primer pelotero abiertamente gay.
Es una barrera que ya se rompió en la NBA y en la NFL.
“Si alguien acá convocara a una reunión y revelara que es gay, pienso que todos aceptaríamos eso, lo apoyaríamos y literalmente sólo nos concentraríamos en lo siguiente, que es ganar los juegos. Eso es realmente lo que importa”, dijo Christian Yelich, jardinero de los Cerveceros de Milwaukee y Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en 2018. “No importa cuál es la sexualidad de alguien”.
El dominicano Julio Rodríguez, toletero de Seattle; el lanzador Marcus Stroman, de los Cachorros de Chicago, y el pitcher Kevin Gausman, de Toronto, figuran entre un grupo de jugadores que han celebrado públicamente el Mes del Orgullo.
“El amor gana”, dijo Rodríguez a The Associated Press. “Definitivamente puedes ver que no soy sólo yo, sino que había definitivamente más gente en esta liga que apoyan esto. Siento que ustedes pueden ver un cambio en esto. Hay apoyo”.
Pero persisten las discrepancias. Los Dodgers de Los Ángeles han enfrentado críticas por incluir a la organización Hermanas de la Perpetua Indulgencia en su Décima Noche del Orgullo, prevista para este viernes. Clayton Kershaw, as de los Dodgers, mostró su desacuerdo con la decisión, pero dijo que sus objeciones se basaban en el retrato satírico que hace la organización de figuras religiosas, no en su apoyo a la comunidad LGBTQ+.
Trevor Williams, pitcher de Washington, se mostró molesto por la decisión del club. Consideró que el grupo se mofa del catolicismo, la religión que él profesa.
La objeción a las Hermanas, un grupo conformado principalmente por hombres que se visten de monjas, llega un año después de que algunos jugadores de Tampa Bay citaron su fe cristiana para negarse a vestir camisetas alusivas al Mes del Orgullo. Varios jugadores de hockey sobre hielo optaron también por no vestir los jerseys con los colores del arcoíris durante la más reciente campaña.
Rob Manfred, el comisionado de las Grandes Ligas, dijo el jueves que su oficina ha recomendado a los equipos que no añadan toques ni parches del arcoíris a los uniformes, para no poner a los peloteros “en una postura de hacer algo que los haga sentir incómodos por sus puntos de vista personales”.
El veterano relevista Antony Bass expresó el mes pasado su apoyo en las redes sociales al boicot que emprendieron algunos grupos contra Target y Bud Light, por el apoyo que dieron esas empresas a la comunidad LGBTQ+.
Luego, se disculpó por compartir la publicación por medio de sus historias en Instagram.
“Yo no diría que esto está causando una barrera”, dijo Bass antes de ser dado de baja por los Azulejos la semana pasada. “Todos deberían tener la capacidad de expresar sus sentimientos y puntos de vista”.
Bass fue abucheado por muchos seguidores de Toronto tras su publicación. Otros parecen preguntarse cuán lejos llegarán sus clubes en términos del apoyo a la diversidad sexual.
Texas es el único equipo de las mayores que no realizará una Noche del Orgullo este mes.
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Jay Cohen está en Twitter como https://twitter.com/jcohenap