CARACAS (AP) — María Corina Machado, la legisladora más votada en las elecciones legislativas de 2010 en Venezuela y que luego fue despojada de su investidura parlamentaria, formalizó el viernes su participación en las primarias del 22 de octubre en las que los adversarios del presidente Nicolás Maduro elegirán a un candidato unitario para los comicios presidenciales de 2024.
Machado, una ingeniera industrial de 55 años, representará al partido Vente Venezuela en una contienda que se espera que sume al menos una docena de candidatos y cuyo proceso de inscripción cierra el sábado.
En 2014 la mayoría oficialista en el Legislativo removió a Machado luego de que aceptara el cargo de “representante alterna” de Panamá ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) con el propósito de denunciar presuntos delitos cometidos por el gobierno de Maduro. Posteriormente se le impuso una sanción que la inhabilitó para ejercer cargos públicos por un año, lo que le impidió postularse para las elecciones parlamentarias de 2015 que ganó abrumadoramente la oposición.
En los últimos años fue una de las voces más críticas de los líderes de los mayores partidos opositores, a los acusó de fracasar en su política para separar a Maduro del cargo y, ya debilitados, de intentar pactar con el gobierno a cambio de mantener pequeñas cuotas de poder. A su vez promovió el boicot en las pasadas elecciones nacionales y regionales argumentando que no existían condiciones para comicios libres y democráticos.
"El momento llegó” de enfrentar electoralmente al partido de gobierno, declaró Machado a la prensa minutos antes de asumir el compromiso ante la Comisión Nacional de Primarias.
Machado también tiene pendiente desde 2014 un proceso judicial por el presunto delito de conspiración que no ha avanzado.
“Todos los días inventan una acusación nueva contra mí”, comentó Machado sobre los rumores de que ese sería un as en la manga del gobierno para inhabilitarla. “Ellos han utilizado ese mecanismo de extorsión para meter presa a mucha gente honesta. A estas alturas el único que inhabilita es el pueblo”, agregó.
En las últimas semanas el oficialismo revivió las denuncias de un supuesto plan para ejecutar un “golpe de Estado” y asesinar a Maduro y otros dirigentes oficialistas en 2014, del que entonces habían acusado a Machado y otros opositores.
Como prueba mostraron supuestos correos electrónicos que la exlegisladora habría compartido con opositores. Los implicados afirmaron que los mensajes eran falsificados.
Maduro, que asumió la presidencia en abril de 2013 y fue reelecto en 2018 en unos comicios considerados por sus críticos locales y extranjeros como fraudulentos, ha denunciado varios planes de magnicidio y decenas de actos de sabotaje y complot.