WASHINGTON CROSSING, Pensilvania, EE.UU. (AP) — La familia de una niña de 2 años arrastrada junto con su hermano por una inundación repentina que cubrió su vehículo en una carretera de Pensilvania expresó su gratitud por el hallazgo de un cadáver que se cree que es la menor.
El cadáver fue encontrado la tarde del viernes en el río Delaware cerca de una planta de tratamiento de aguas residuales de Filadelfia, a unos 50 kilómetros (30 millas) de donde las aguas se llevaron a Matilda Sheils, indicaron las autoridades el viernes por la noche. La oficina del médico forense de Filadelfia planea realizar una autopsia al tiempo que las autoridades continúan con la búsqueda del hermano menor de Matilda, Conrad, de 9 meses.
La madre de ambos, Katie Seley, de 32 años, también murió en la inundación, de acuerdo con las autoridades.
“Estamos agradecidos de que nuestra pequeña Mattie haya sido traída a casa con nosotros. Seguimos orando por el regreso de Conrad”, señaló la familia en un comunicado publicado el sábado por la policía del municipio de Upper Makefield.
Los miembros de la familia también expresaron “una gratitud continua por la abrumadora efusión de amor, apoyo y preocupación de la comunidad y de personas de todo el país mientras los rescatistas han trabajado incansablemente para encontrar a Mattie y Conrad”.
“Gracias a todos, nuevamente, por su compasión y su amabilidad. Nos sentimos honrados”, se lee en el comunicado.
La familia de Charleston, Carolina del Sur, estaba visitando a parientes y amigos en el área y se dirigía a una parrillada la noche del 15 de julio cuando su vehículo fue azotado por un “muro de agua”, según el jefe de bomberos de Upper Makefield, Tim Brewer.
El padre de los niños, Jim Sheils, protegió al hijo de 4 años de la pareja, mientras que Seley y una abuela agarraron a los otros niños, dijo Brewer. Sheils y el hijo lograron ponerse a salvo, pero Seley y la abuela fueron arrastradas. La abuela sobrevivió.
La oficina del forense del condado Bucks identificó a otras cuatro personas que murieron ahogadas en el área como Enzo Depiero, de 78 años, y Linda Depiero, de 74, de Newtown; Yuko Love, de 64 años, de Newtown; y Susan Barnhart, de 53 años, de Titusville, Nueva Jersey.
Las muertes y la búsqueda de los menores han provocado una enorme cantidad de apoyo, particularmente en las redes sociales, en el suburbio a unos 60 kilómetros (35 millas) al norte de Filadelfia.
