Queridos por los humanos y acogidos como miembros de familias en todo el mundo, los animales de compañía tienen, sin embargo, un posible inconveniente. Estudios recientes sugieren que estos peludos animales pueden dejar una importante huella de carbono, incluso superior a la de otras actividades contaminantes.
De hecho, tener mascotas en casa puede tener un impacto significativo en el medio ambiente, ya que mantenerlas en buen estado y alimentarlas genera una importante huella de carbono.
El elemento relativo a nuestras mascotas que mayor impacto ambiental tiene es su alimentación, ya que su producción genera una notable huella de CO2, hecho que pasa desapercibido para muchos propietarios.
La huella ambiental global de nuestros peludos amigos puede variar significativamente y depende de factores como su tamaño, el número de animales que tengamos y su dieta.
“La cuestión del impacto de los animales de compañía se ha pasado por alto en gran medida en la investigación y el debate sobre sostenibilidad”.
— Peter Alexander, profesor titular de Seguridad Alimentaria Mundial en la Universidad de Edimburgo (Escocia).
Un estudio, publicado en 2023, sugiere que alimentar a un perro de 10 kg con comida húmeda se asocia con el equivalente a 6.541 kg de emisiones de CO₂ al año. En cambio, una dieta de comida seca para el mismo perro daría lugar a emisiones equivalentes a 828 kg de CO₂.
En 2017, una investigación reveló resultados igualmente alarmantes. El documento científico afirmaba que las emisiones derivadas de la producción de comida seca para gatos y perros solo en Estados Unidos ascendían a cerca de una cuarta parte de todo el impacto de la producción de carne en el país.
A escala mundial, la fabricación de alimentos secos para mascotas representa entre el 1,1% y el 2,9% de las emisiones agrícolas, hasta el 1,2% del uso de tierras agrícolas y aproximadamente el 0,4% de las extracciones de agua para la agricultura. Esto equivale a una huella ambiental de aproximadamente el doble de la superficie del Reino Unido, con unas emisiones de gases de efecto invernadero que lo situarían como el 60º país emisor.
Pero hay varias medidas que podemos tomar para reducir la huella de nuestras mascotas. Según los expertos, un buen comienzo es reducir la cantidad de comida necesaria. Si optamos por razas más pequeñas, podemos conservar los beneficios de la tenencia de mascotas al tiempo que reducimos la carga medioambiental.
Alimentar a las mascotas en la cantidad adecuada también ayudaría a restringir la demanda de alimentos para mascotas, y también a hacer frente a la obesidad de las mascotas. El tipo de comida que damos a nuestras mascotas es igualmente importante.
“Por último, y lo más obvio, tener menos mascotas ayudaría”, explica Peter Alexander, profesor titular de Seguridad Alimentaria Mundial en la Universidad de Edimburgo (Escocia) y especialista que ha estudiado la huella de carbono de los animales de compañía.
Metro habló con el experto para saber más.
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de la población mundial tiene un animal de compañía en casa.
Cómo minimizar el impacto climático de nuestras mascotas?
1.- Alimentar a las mascotas con dietas más sostenibles desde el punto de vista productivo.
2.- Mantener animales pequeños para reducir la cantidad de comida necesaria.
3.- Tener menos mascotas.
Entrevista
Peter Alexander, Profesor de Seguridad Alimentaria Mundial en la Universidad de Edimburgo, Escocia
P: ¿Por qué decidió estudiar la huella de carbono de nuestras mascotas?
- La cuestión del impacto de los animales de compañía se ha pasado por alto en gran medida en la investigación y el debate sobre la sostenibilidad. Esto puede deberse al uso sustancial de subproductos como ingredientes. Sin embargo, algunos ingredientes de los alimentos para mascotas son aptos para el consumo humano y, aunque no sea así, esto no significa que no se les deba asignar ninguna carga medioambiental.
P: ¿Cómo es posible que los alimentos para animales de compañía tengan un mayor impacto ambiental que volar en avión, como se divulga?
- La producción de los alimentos que consumen las mascotas tiene consecuencias medioambientales, incluidas las emisiones de gases de efecto invernadero. Que la comparación con volar en avión sea útil es otra cuestión y, desde luego, hay que tener cuidado de dejar claras las unidades que se comparan.
P: Háblenos del impacto de los alimentos para mascotas en el medio ambiente.
- Calculamos que la producción mundial de alimentos secos para animales de compañía está asociada a entre 56 y 151 millones de toneladas de emisiones equivalentes de dióxido de carbono, lo que supone entre el 1,1% y el 2,9% de las emisiones agrícolas mundiales. Esto equivale a las emisiones totales de países como Mozambique o Filipinas.
P: ¿Pueden contribuir también las empresas o los gobiernos?
- Las empresas tienen un papel que desempeñar en la formulación y comercialización de alimentos para animales de compañía para ayudar a los consumidores a elegir opciones más sostenibles. Las políticas gubernamentales también podrían desempeñar un papel. Por ejemplo, la obligatoriedad de un etiquetado que indique las emisiones equivalentes de dióxido de carbono asociadas a cada alimento para animales de compañía podría contribuir a informar a los propietarios de mascotas y ayudarles a tomar decisiones.