MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
El atentado del 26 de agosto, que dejó además más de 150 heridos, ocurrió cuando un terrorista suicida detonó una bomba en la puerta de Abbey Gate, uno de los accesos al aeropuerto, en lo que se trató del comienzo de una campaña de ataques de la filial yihadista aprovechando el caos provocado por el retorno del movimiento fundamentalista al poder.
El ataque fue el más sangriento registrado contra las fuerzas estadounidenses en Afganistán desde el derribo en 2011 de un helicóptero militar CH-47 Chinook sobre la provincia de Maidan Wardak, en plena invasión del país para expulsar del poder a los talibán, que se saldó con 38 muertos.
"Hoy, la (primera dama) Jill (Biden) y yo recordamos y lloramos a los 13 valientes militares y a los más de 100 afganos inocentes asesinatos en el horrendo ataque terrorista de Abbey Gate", ha declarado Biden a través de un comunicado.
"Honraremos para siempre la memoria de los 13 militares arrebatados de los brazos de sus familias, allegados y camaradas mientras cumplían con una noble misión", ha añadido.
