VIENA (AP) — Irán ha reducido su enriquecimiento de uranio a niveles cercanos al grado armamentístico, según un reporte del Organismo Internacional Energía Atómica al que The Associated Press tuvo acceso el lunes.
El reporte confidencial se produce en momentos en que Irán y Estados Unidos negocian un intercambio de prisioneros y la liberación de miles de millones de dólares en activos iraníes congelados en Corea del Sur. Reducir su enriquecimiento de uranio podría servir como otra muestra de que Teherán intenta reducir las tensiones con Estados Unidos después de años de deterioro desde el colapsó de su acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales.
El reporte del OIEA señala que Irán tiene 121,6 kilogramos (268 libras) de uranio enriquecido a un 60%, un crecimiento mucho menor al de conteos previos. Un reporte del organismo en mayo pasado indicaba que las reservas de uranio al 60% eran de poco más de 114 kilogramos (250 libras). En febrero tenía 87,5 kilos (192 libras).
El uranio enriquecido a una pureza del 60% se encuentra a tan solo un pequeño paso técnico de los niveles armamentísticos del 90%. Irán ha sostenido que su programa es pacífico, pero el director general del OIEA ha advertido que Teherán tiene suficiente uranio enriquecido para “varias” bombas nucleares, en caso de que decida fabricarlas.
Es probable que Irán aún necesite de varios meses para construir un arma. Las agencias estadounidenses de inteligencia declararon en marzo que Teherán “no se encuentra actualmente en actividades cruciales de desarrollo de armas nucleares que serían necesarias para fabricar un dispositivo nuclear que pudiera ser puesto a prueba”.
El acuerdo nuclear de 2015 limitaba las reservas de uranio de Irán a 300 kilos (661 libras) y un enriquecimiento de 3,67%, suficiente para impulsar una planta de energía nuclear. El retiro unilateral de Estados Unidos del pacto en 2018 puso en marcha una serie de ataques y escaladas por parte de Teherán debido a su programa.
Irán ha estado produciendo uranio enriquecido al 60% de pureza, un nivel al que los expertos en la no proliferación aseguran que Teherán no tiene un uso civil. Sin embargo, Irán sostiene que su programa es con fines pacíficos. La OIEA, Occidente, y varios países aseguran que Irán tenía un programa nuclear militar secreto el cual dejó de lado en 2003.
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El periodista de Associated Press Jon Gambrell, en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, contribuyó a este despacho.
