MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El murciano se metió entre los ocho mejores del 'grande' neoyorquino por tercer año consecutivo y prosigue de este modo con la defensa de su título, que ahora tendrá ya su primer gran examen contra el ganador del atractivo duelo entre el italiano Jannik Sinner y el alemán Alexander Zverev.
Tras ceder su primer parcial del torneo en la anterior ronda ante el británico Dan Evans, en esta ocasión el número uno del mundo no se despistó en ningún momento y, salvo un momento puntual de la tercera manga, siempre dio la sensación de control ante un Arnaldi, debutante en estas lides en un 'Grand Slam' y animado por su gran triunfo ante Cameron Norrie, pero que no logró dar con la tecla para hacer daño al español.
Bajo una Arthur Ashe 'techada', Alcaraz se mostró muy firme, sobre todo con el servicio, y fue creciendo poco a poco, dejando una vez más destellos de su enorme calidad y variedad de golpes para desarbolar al italiano, que tampoco fue capaz de aprovechar cuando por fin se puso por delante en el marcador.
Tras unos compases de tanteo, en los que el actual campeón no empezó fino y con demasiados errores no forzados, Alcaraz no perdonó su primera oportunidad al resto para ponerse 0-40 y romper por primera vez pese a la resistencia del tenista de San Remo, mucho más errático en su intento de ser agresivo.
El de El Palmar no desperdició la ventaja, se asentó aún más en la pista y no sólo se hizo con el set sino que comenzó rompiendo en el segundo tras un sensacional 'passing'. Arnaldi no se dejó llevar y se mantuvo al acecho esperando alguna desconexión de su rival, que únicamente le concedió un 40-40 con 4-3, situación salvada con su habilidad y talento en la red.
Un nuevo 'break' permitió al primer cabeza de serie cerrar la segunda manga y empezar de nuevo por delante la tercera. Sin embargo, el italiano decidió seguir resistiendo y encontró por fin premio con un gran juego al resto para lograr por fin la ansiada rotura y verse por primera vez por delante en el electrónico.
Pero fue un espejismo porque Alcaraz se rehizo al instante para frenar la alegría de su oponente y restablecer el equilibrio con una rápida rotura. El murciano recuperó su fortaleza al servicio y con 5-4 tiró de su mayor experiencia para conseguir un nuevo y definitivo quiebre para sellar su pase a los cuartos, ronda donde ya se atisban las grandes dificultades para alcanzar otra gran final.