MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
La rebaja del crecimiento trimestral del PIB desde el 1,5% al 1,2% en el segundo trimestre del año se debe a una mayor caída de la demanda doméstica respecto a la estimada previamente, desde el -0,3% al -0,6%, así como a un retroceso algo más pronunciado del consumo privado y a un menor aumento de la inversión pública.
En concreto, el consumo privado bajó un 0,6% entre abril y junio, una décima más de lo avanzado a mediados de agosto, con un retroceso del consumo de los hogares del 0,7%, dos décimas mayor al estimado previamente.
La inversión privada residencial subió en el segundo trimestre un 2%, una décima más de lo avanzado, mientras que la no residencial se contrajo un 1%, en contraste con el estancamiento observado a mediados de agosto.
Con estos mimbres, la demanda privada retrocedió entre abril y junio un 0,8%, tres décimas más de lo estimado anteriormente.
En cuanto a la demanda pública, ésta creció dos décimas menos de lo esperado, hasta el 0,1%, tras estancarse el gasto gubernamental, en contrastre con el avance trimestral del 0,1% estimado inicialmente. La inversión pública, por su parte, subió un 0,2% en el segundo trimestre, un punto menos de lo previsto.
Por el lado de la demanda externa, las exportaciones de bienes y servicios se incrementaron un 3,1%, una décima menos de lo esperado, mientras que las importaciones descendieron un 4,4%, una décima más de lo avanzado a mediados de agosto por el Gobierno nipón.
Pese a la rebaja del crecimiento del PIB del segundo trimestre, la economía japonesa aceleró su avance respecto al primer trimestre del año, cuando su PIB creció un 0,7%.