EL CAIRO (AP) — Un ataque de dron contra un mercado abierto en la capital sudanesa, Jartum, mató al menos a 43 personas, informaron activistas y trabajadores médicos, dentro de los combates entre el ejército y un poderoso grupo paramilitar por el control del país.
Al menos 55 personas resultaron heridas en el ataque en el vecindario de May en Jartum, donde había fuerte presencia de los paramilitares que combaten a las fuerzas armadas, dijo en un comunicado el Sindicato Médico de Sudán. Las víctimas fueron llevadas al Hospital Universitario de Bashair.
Los Comités de Resistencia, un grupo activista que organiza ayuda humanitaria, publicó imágenes en medios sociales que mostraba los cuerpos envueltos en sábanas blancas en un patio al aire libre en el hospital.
En un primer momento no estaba claro qué bando era responsable del ataque del domingo.
Sudán está inmerso en la violencia desde mediados de abril, cuando las tensiones entre el ejército, liderado por el general Abdel Fattah Burhan, y las Fuerzas de Apoyo Rápido, un contingente paramilitar a las órdenes del general Mohamed Hamdan Dagalo, derivaron en combates abiertos.
Las FAR acusaron a la fuerza aérea de ser responsables del ataque del domingo, aunque eso no se pudo confirmar de manera independiente.
Entretanto el ejército declaró el domingo en la tarde que no ataca a civiles, tachando las acusaciones de las FAR de “aseveraciones falsas y engañosas”.
Los cañoneos y bombardeos de las dos partes son comunes en el conflicto, que ha reducido Jartum a un campo de batalla urbano.
El conflicto se ha esparcido a otras partes del país. En la zona del Gran Jartum – que incluye las ciudades de Jartum, Omdurman y Bahri – las FAR han tomado viviendas particulares para convertirlas en cuarteles. Los militares han respondido bombardeando zonas residenciales, dicen activistas y grupos de derechos humanos.
En la región occidental de Darfur —donde se produjo una campaña genocida a principios de la década del 2000— el conflicto ha adoptado la forma de violencia étnica, donde las FAR y milicias árabes aliadas atacan a grupos de etnia africana, según grupos de derechos y Naciones Unidas.
Este fin de semana estallaron fieros combates en al-Fasher, la capital de la provincia Darfur Norte, tras un ataque contra una instalación del ejército por parte de las FAR, reportó la prensa local.
Clementine Nkweta-Salami, coordinadora humanitaria de la ONU en Sudán, expresó inquietudes el domingo sobre los combates en al-Fasher. En X (antes Twitter), la funcionaria pidió a las facciones poner fin a los combates “para que las agencias humanitarias puedan traer alimentos, medicinas y alojamiento a quienes más los necesitan”.
El conflicto ha dejado más de 4.000 muertos, según cifras de agosto de Naciones Unidas. Sin embargo, la cifra real es casi con certeza mucho mayor, según médicos y activistas.
Unos cinco millones de personas se han visto desplazadas dentro de Sudán o han huido del país para escapar de la violencia según la Organización Internacional para las Migraciones.