CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Hombres armados asesinaron el martes al representante de la Fiscalía General de la República en el sureño estado de Guerrero, se informó el martes.
La fiscalía estatal indicó en un comunicado que Fernando García Fernández fue atacado en su vehículo cerca de su oficina en Chilpancingo, la capital de Guerrero.
Fotografías del lugar mostraban una camioneta color plata con los vidrios rotos y chocada contra un muro. El cadáver se encontraba fuera del vehículo, lo que podría indicar que intentó huir y fue rematado en la calle.
El asesinato se produjo tres días después de que mataran a otro fiscal en la localidad de Coyuca de Catalán, un área muy alejada de la capital pero igual de violenta. En esa ocasión, se trató de un miembro de la fiscalía estatal, Victor Salas Cuadras, quien además era mayor activo de la justicia militar.
Salas Cuadras abandonó esa región conocida como Tierra Caliente, fronteriza con el estado de Michoacán y de intensa actividad del crimen organizado, después de recibir amenazas pero había regresado a Coyuca recientemente. Fue asesinado el sábado.
La violencia también hizo acto de presencia estos días en el turístico puerto de Acapulco. Las autoridades siguen buscando a siete personas que estaban en un centro de rehabilitación para alcohólicos, fueron sacadas de ese lugar y permanecen desaparecidas.
El lunes, fueron encontrados restos humanos en distintos puntos de la misma ciudad que todavía no han sido identificados. La fiscalía, en su nota del martes, dijo que continuaba con el análisis forense de los cadáveres pero no aclaró a cuantas personas podrían pertenecer.
Guerrero es uno de los estados más pobres de México y lleva mucho tiempo a merced de múltiples bandas criminales que trafican drogas y extorsionan a los residentes. En 2014, la región se hizo tristemente conocida por la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, un crimen que conmocionó al país y puso en evidencia los vínculos entre cárteles locales, las fuerzas de seguridad y las autoridades de todos los niveles de gobierno.
Tras el homicidio del funcionario federal el martes se reforzó la seguridad en esa zona con miembros del Ejército y la Guardia Nacional. Algunos elementos federales y estatales se mantendrán de forma permanente haciendo operativos, indicó la Fiscalía de Guerrero en un nuevo mensaje el martes por la tarde.
