TALLINN, Estonia (AP) — La prensa estatal bielorrusa informó que 48 niños de Ucrania arribaron a Bielorrusia el martes de regiones ucranianas que Rusia dice haber anexado.
Los niños provenían de poblaciones de las regiones de Donetsk, Luhansk y Zaporiyia ocupadas por el ejército ruso en julio de 2022. Moscú anexó ilegalmente esas regiones en diciembre del año pasado, pero no las controla totalmente.
En fotos difundidas por la agencia noticiosa estatal bielorrusa Belta, los niños aparecen sosteniendo la bandera roja y verde de Bielorrusia y supuestamente agradeciendo a las autoridades bielorrusas, flanqueados por agentes de la policía y de la fuerza antimotines.
El transporte de los niños fue organizado por una organización de beneficencia bielorrusa apoyada por el presidente Alexander Lukashenko, que ha aplicado planes de recuperación de la salud para niños ucranianos en Bielorrusia.
“El presidente, a pesar de las presiones externas, ha dicho que este importante proyecto humanitario debe continuar”, dijo el jefe de la organización, Alexei Talai, en entrevista con Belta. “Todo el pueblo bielorruso”, aseguró, quiere ayudar a los “niños de ciudades y pueblos desmoronados en los nuevos territorios de Rusia”.
Anteriormente, las autoridades bielorrusas han rechazado las denuncias de transporte ilegal de niños desde Ucrania.
En junio, dirigentes opositores bielorrusos dieron a la Corte Penal Internacional materiales que, según ellos, mostraban a unos 2.100 niños ucranianos de al menos 15 poblaciones ocupadas por Rusia transportados a la fuerza a Bielorrusia con el beneplácito de Lukashenko.
Pavel Latushka, un exministro de Cultura bielorruso, espera que el material impulse a la CPI a emitir una orden de arresto para Lukashenko similar a la que emitió para el presidente ruso Vladímir Putin.
“Vemos cada vez más pruebas relacionadas con el transporte ilegal de niños ucranianos a Bielorrusia y esto continuará hasta que las organizaciones internacionales reaccionen y detengan a Minsk”, dijo Latushka en entrevista con The Associated Press.
En marzo, la CPI emitió órdenes de arresto para Putin y la comisionada para los derechos de los niños, Maria Lvova-Belova. Los jueces en La Haya dijeron que había “fundamentos razonables para creer” que los dos eran responsables de la deportación ilegal y transporte de niños de las regiones ucranianas ocupadas a Rusia, entre otros crímenes de guerra.
Bielorrusia ha sido el aliado más estrecho de Moscú desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, cuando Lukashenko permitió al Kremlin enviar tropas y armas a Ucrania desde territorio bielorruso. Rusia ha instalado armas nucleares tácticas en el país.
