MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El refugiado Salwan Momika quemó el libro sagrado musulmán en la ciudad de Malmoe el pasado sábado antes de ser interceptado por la Policía sueca.
"Desde el punto de vista de la República Islámica de Irán, las promesas del Gobierno sueco en su oposición a la profanación del Sagrado Corán no son suficientes", ha lamentado el portavoz de Exteriores iraní, Nasser Kanaani, en declaraciones recogidas por la agencia semioficial Tasnim.
También Arabia Saudí ha protestado oficialmente contra la quema. "El Ministerio de Exteriores reitera la posición contraria del Reino a estos actos, emprendidos bajo la excusa de la libertad de expresión para inflamar los ánimos del mundo musulmán", según un comunicado del Ministerio saudí.
Suecia ha estado desde este verano en el punto de mira de los países musulmanes por la quema de ejemplares del Corán, replicadas con críticas políticas y manifestaciones locales contra sus misiones diplomáticas.