WELLINGTON, Nueva Zelanda (AP) — La votación anticipada de las elecciones generales de Nueva Zelanda, previstas para el 14 de octubre, comenzó el lunes, y el candidato conservador Christopher Luxon acudió a dejar su boleta.
Algunas zonas de Australia también abrieron el voto anticipado para un referendo que consagraría en la constitución australiana un mecanismo para que la comunidad indígena asesore al Parlamento en cuestiones que afectan a su vida.
En Nueva Zelanda, la campaña del primer ministro, Chris Hipkins, sufrió un revés el domingo cuando él dio positivo en COVID-19. Hipkins indicó que se aislaría cinco días o hasta que diera negativo en una prueba, aunque tenía previsto participar en algunos eventos a través de Zoom.
Hipkins y su Partido Laborista, de tendencia progresista, están por detrás del opositor Partido Nacional, que lidera Luxon, en los sondeos de opinión.
“Tras una noche dura me desperté esta mañana sintiéndome bastante mal, y acabo de recibir este resultado en la prueba”, escribió Hipkins en Instagram, antes de señalar que se esforzaría el doble cuando reanudara los actos de campaña.
Luxon presentó el domingo su plan de acción de 100 días, que según dijo ofrecería alivio fiscal, reactivaría la economía y restauraría la ley y el orden. “Los neozelandeses han esperado seis largos años a un gobierno que se centre en las cosas que les importan y ofrezca resultados”, dijo Luxon.
En Australia, donde el voto es obligatorio, en torno al 98% de los australianos que podían hacerlo se habían registrado para votar en el referendo sobre la Voz Indígena al Parlamento.
La votación anticipada comenzó en cuatro estados o territorios el lunes, y los demás empezarían el martes tras celebrar un feriado el lunes.
La campaña a favor del “sí” va por detrás en las encuestas, pero el primer ministro, Anthony Albanese, que apoya el posible cambio, dijo que seguía teniendo esperanzas.
“Sé que mucha gente no ha tomado una decisión, y lo que sé es que (...) cuando la gente habla de estos temas, llega a un voto por el ‘sí’ con bastante facilidad”, dijo Albanese a la prensa en Melbourne. “De verdad creo que la clave durante la siguiente quincena son esas conversaciones cara a cara con personas que aceptan esta petición de la inmensa mayoría de pueblos aborígenes e isleños del estrecho de Torres”.
Algunos críticos dicen que la iniciativa del referendo debería haber sido bipartidista y que quedan muchas cuestiones sin concretar sobre cómo funcionaría en la práctica el mecanismo de asesoría.
Es una coincidencia que las votaciones en los dos países se celebren el mismo día.