NUEVA DELHI (AP) — India se dijo el jueves resuelta a reducir la presencia diplomática canadiense en su territorio —si bien aún no ha puesto plazos—a raíz del choque por las acusaciones del gobierno de Canadá de que el país asiático estaría implicado en el asesinato de un líder separatista sij en un suburbio de Vancouver.
Nueva Delhi ha tachado las acusaciones de absurdas.
El vocero del ministerio indio del Exterior, Arindam Bagchi, declaró en conferencia de prensa que ambos países están estudiando “modalidades para lograr” la paridad en los niveles de representación diplomática. Añadió que no entrará en detalles.
Días atrás, un funcionario canadiense afirmó que India quiere que Canadá retire a 41 de sus 62 diplomáticos en el país.
Ante la pregunta de si Canadá ha presentado pruebas para respaldar sus acusaciones, Bagchi se limitó a reiterar la postura de Nueva Delhi de que está abierto a estudiar “cualquier cosa pertinente y específica” que presente Canadá.
India ha cancelado visas para canadienses. Canadá no ha tomado represalias por ello. Previamente, los dos países expulsaron a un diplomático de alto rango cada uno.
El primer ministro canadiense Justin Trudeau aparentemente ha intentado calmar la tormenta diplomática al decir que su país “no busca provocar ni hacer las cosas más grandes”.
Durante años, India ha acusado a Canadá de dar rienda suelta a sijs separatistas que luchan por la creación de Khalistan, una nación sij en el estado norteño de Punjab.
Bagchi insistió el jueves que Canadá mejore la situación de seguridad de sus diplomáticos. Nueva Delhi sostiene que sus diplomáticos no se sienten seguros al ir o volver del trabajo en las misiones diplomáticas en el país norteamericano porque los separatistas sij han creado un clima de miedo.
Trudeau dijo el mes pasado que había “denuncias verosímiles” de participación india en el asesinato de Hardeep Niijar, un dirigente sij de 45 años abatido por hombres enmascarados en junio en Surrey, en las afueras de Vancouver.
Durante años, India dijo que Niijar, un ciudadano canadiense nacido en la India, tenía lazos con el terrorismo, algo que Niijar siempre negó.