ZARAGOZA, 7 (EUROPA PRESS)
Ha dedicado parte del discurso que ha pronunciado a su hija, la Princesa de Asturias, para recordarle que el compromiso que ha asumido "conlleva la mayor responsabilidad con España" y que la Corona simboliza "la unidad y permanencia de España".
"Sé que el juramento solemne ante esta bandera y el cariño por esta tierra zaragozana y aragonesa que te acoge formarán parte de tus mejores recuerdos. Sé que siempre tendrás presente que tu responsabilidad, en cualquier circunstancia y todo momento, es servir a España con toda tu energía y determinación, con verdadera pasión", ha expresado Don Felipe VI.
Su Majestad ha recordado que el 11 de octubre de 1985 prestó su juramento ante la bandera de España en el mismo Patio de Armas de la AGM, hace 38 años. Ha reconocido que es "muy emocionante" presidir la jura de bandera de su hija, la Princesa Leonor, un acto de "gran trascendencia" al dar continuidad a una tradición. "Sentimientos que compartimos con todos aquí y con la gran familia castrense", ha apostillado.
"UNA MISMA VOCACIÓN"
Asimismo, se ha dirigido a todos los caballeros y damas cadetes de la AGM, a quienes ha transmitido que a todos les une "la exigencia de un alto nivel académico y, sobre todo, una misma vocación: Servir en unas Fuerzas Armadas y Guardia Civil modernas y ejemplares, con gran experiencia internacional y muy queridas por los españoles".
El Rey ha recordado a los cadetes que, con la jura de bandera, se han comprometido a cumplir fielmente sus obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución, obedecer y respetar al Rey y a sus jefes, no abandonarlos nunca y "si fuera preciso", entregar su vida en defensa de España. "No hay un compromiso de entrega mayor", ha sentenciado.
Ha resaltado que el juramento o promesa "implica un deber personal, moral y legal que no tiene fecha de vencimiento", remarcando que han realizado este compromiso "de manera libre, voluntaria y consciente" y que "no hay mejor propósito que el servicio a los demás, que la entrega a tu país".
Igualmente, Don Felipe VI hecho notar que los cadetes han empeñado su palabra y su honor con la Constitución, "máxima expresión de nuestra unión", añadiendo que la bandera de España "nos une a todos los españoles" y "representa el legado de una Nación construida con el esfuerzo de generaciones y generaciones, un patrimonio de inmenso valor, de siglos de historia compartida, repleta de desafíos, ilusiones y sacrificios de millones de personas".
Ha enfatizado que muchos han dejado su vida anteponiendo el servicio a España a sus intereses personales, a quienes ha rendido homenaje "como modelo de todos los valores" de la AGM.
Por otro lado, ha apelado a los valores de "honor, compañerismo, lealtad, disciplina y dedicación", que "no están reservados en ningún caso a unos pocos, sino que deben ser comunes para todos", emplazándoles a "cultivarlos de por vida".
"La integridad, junto a la honestidad y la rectitud han de ser una constante en vuestra trayectoria, profesional y personal. Son virtudes capitales en la milicia, así como en el servicio público a los españoles y son guía esencial de comportamientos y actitudes", ha manifestado.
También ha apelado al compañerismo y al trabajo en equipo, confiando en que con todos estos valores bien asentados podrán afrontar las misiones que se les encomienden "sin duda, con mayor garantía de éxito", junto a su preparación técnica y humana.
Estarán capacitados para "tomar decisiones bajo presión y en situaciones complejas", siempre con lealtad a sus jefes y subordinados y "asumiendo el liderazgo". Ha observado que "la disciplina es un factor de cohesión que obliga a mandar con responsabilidad y a obedecer lo mandado". Don Felipe VI les ha animado a esforzarse permanentemente, a mantener la ilusión, a mejorar con ambición sus conocimientos y capacidades.
"UN GRAN HONOR"
El general director de la AGM, Manuel López, ha afirmado que es "un gran honor" que Doña Leonor haya jurado bandera en la Academia. Ha añadido que los cadetes "sienten con orgullo este compromiso con España".
Ha asegurado que los alumnos "han demostrado su capacidad de sacrificio, de adaptación, compañerismo y lealtad, todo ello bajo la dirección de sus profesores". Después, ha dado la enhorabuena a todos, "especialmente a madres y padres".
El compromiso con España "lo es todo", ha continuado el general director, recalcando que "implica una gran responsabilidad, que solo se puede entender desde el profundo amor a España y una generosidad sin parangón" porque "no es un camino exento de sacrificios y no será fácil".
"El esfuerzo, la dedicación y la constancia en el estudio serán esenciales", ha abundado el general, observando que, ahora, su única misión es formarse "lo mejor posible".
REVISTA A LA FORMACIÓN
Una vez formados los 411 caballeros y damas cadetes que han jurado o prometido la bandera, a las 12.00 horas, han entrado los Reyes en el Patio de Armas.
Felipe VI ha pasado revista a la formación, compuesta por la plana mayor de la agrupación de cadetes, la escuadra de gastadores, la unidad de música, y los batallones segundo y tercero de alumnos.
El general director, Manuel López, ha tomado juramento a los cadetes, quienes lo han llevado a cabo "por su conciencia y honor". Tras las intervenciones del Rey y del general director, se ha realizado el homenaje a los caídos y, finalmente, los cadetes han desfilado por la avenida principal del recinto militar.
La Princesa de Asturias ha sido la primera de sus compañeros en jurar bandera y al acercarse a la enseña nacional, se ha quitado el ros, con pluma roja como indicativo de que es cadete de primer año, y ha besado la bandera. Portaba el arma reglamentaria y el uniforme de gala del Ejército de Tierra.
Al acto han asistido la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, y el delegado del Gobierno, Fernando Beltrán, entre otras autoridades.
FORMACIÓN CASTRENSE
La Princesa Leonor, futura capitana general de las Fuerzas Armadas, inició el pasado 17 de agosto su formación militar en 'la General', como se conoce popularmente a la Academia del Ejército de Tierra, y, tras completar la primera fase de su instrucción y recibir el sable que la acredita simbólicamente como dama cadete, este sábado ha cumplido con el acto más trascendental en la vida de los militares: la jura de la bandera.
Al contrario de lo que ocurrió con su padre, el Rey Felipe VI, la Princesa de Asturias no ha realizado la jura de bandera en solitario sino acompañada de otros más de 400 cadetes que, como ella, han iniciado recientemente su formación.