MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
Nacida en Alcalá de Henares, Francisca de Pedraza quedó huérfana a los cuatro años, cuando las monjas de la localidad la acogieron en el en el convento de San Juan de la Penitencia, actual Casa de la Entrevista. Posteriormente, fue víctima de malos tratos en su matrimonio, por lo que recurrió a todas las justicias posibles para conseguir el divorcio. Así, después de años y de multitud de negativas, en 1624 acudió a la Universidad de Alcalá de Henares, donde el joven Rector Álvaro de Ayala juzgó por dispensa del nuncio papal.
"No solamente consiguió el divorcio, sino la devolución de su dote, la custodia de sus hijos y el alejamiento tanto del maltratador como de su familia. O sea que tuvo una justicia ejemplar", asegura en declaraciones a Europa Press la presidenta de la Asociación 'Francisca de Pedraza', Julia Pérez, quien igualmente agrega que Francisca de Pedraza fue "una superviviente en una época que las mujeres tenían muy poca capacidad de defenderse y mucho menos de recurrir a la justicia".
Asimismo, Pérez destaca que Francisca de Pedraza es un ejemplo para todas las mujeres víctimas de violencia de género en el mundo, razón por la que, después de ahondar más en su historia, en 2015 decidieron crear la asociación y en 2016 el premio que lleva su nombre, con el objetivo de "fomentar y visibilizar acciones de sensibilización y prevención de violencia de género y las consecuencias que tiene para la vida".
En esta misma línea, Pérez explica que la entrega del primer premio fue "muy especial". "En 1624 las mujeres no podían entrar en el recinto de la universidad. Que Francisca de Pedraza, una mujer del pueblo, entrara en el Paraninfo de la Universidad Alcalá de Henares fue justicia poética. Todos conocieron su historia", añade.
PREMIO 'FRANCISCA DE PEDRAZA'
Respecto al galardón 'Francisca de Pedraza', Pérez asegura que se trata de un reconocimiento a la trayectoria de personas, colectivos, entidades o instituciones que destaquen por su compromiso y dedicación en la prevención, erradicación y la lucha contra la violencia de género.
Este año, tendrá lugar la VII edición del premio, que se otorgará al ganador el próximo 23 de noviembre en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares. Para este 2023 estará abierta la presentación de candidaturas de todas partes del mundo hasta el 20 de octubre, a las 23:59 horas.
En cuanto al jurado, estará presidido por la presidenta de la Asociación 'Francisca de Pedraza', Julia Pérez, y estará constituido por instituciones y personas representantes del mundo jurídico, académico, cultural y empresarial. Además, pueden formar parte de este los galardonados en ediciones anteriores.
El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, por la Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral Contra la Violencia de Género, la Unidad de Atención a la Familia y Mujer, los profesores de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Medellín en Colombia, Javier Juárez y Nora Botero, o las cineastas Mabel Lozano e Isabel de Ocampo ex-aequo de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAM) por sus labores o investigaciones han sido algunos de los galardonados en las pasadas ediciones.
Sin embargo, Pérez apunta que lo más importante no son los homenajes, sino la prevención y que las mujeres no tengan que llegar a esta situación. "Aunque nuestro propio premio no es atención directa, que es sensibilización, en realidad también es muy importante, porque forma parte de esa prevención", añade.
"ROMPER EL SILENCIO"
Finalmente, Pérez hace un llamamiento a la sociedad y recalca que lo más importante en casos de violencia machista es "romper el silencio".
"Cuando vemos, cuando conocemos un caso de este tipo, lo primero que hay que hacer es ayudar a la población, informarla de sus derechos, si es necesario, ponerlo en conocimiento de los servicios sociales. La denuncia es importante pero sería el último paso, porque primero tienen que estar ya preparadas para poder hacerlo. Hay que tener mucho cuidado, cuidarlas mucho, darles mucha protección, ayudarlas a que salgan de esa situación y hacer un proceso de acompañamiento. Si Francesca, sin nada a su favor, en una época que las mujeres no tenían derechos lo consiguió, pues eso tiene que dar también fuerza para las mujeres que están ahora sufriendo esto vean que pueden salir con ayuda de la sociedad", concluye.