LONDRES (AP) — Solicitantes de asilo comenzaron a regresar el jueves a la barcaza atracada frente a la costa sur de Inglaterra, más de dos meses después de ser evacuados tras el hallazgo de la bacteria Legionella, que puede causar enfermedades graves, en el suministro de agua.
Cuando llegó un autobús con el primer grupo de solicitantes de asilo para regresar al buque Bibby Stockholm, los manifestantes se reunieron en las puertas del puerto de Portland, que está a unos 225 kilómetros (140 millas) al suroeste de Londres, para denunciar lo que consideran condiciones “inhumanas” a bordo.
Se cree que todos menos 10 de los 39 hombres evacuados han regresado, aunque llegaron más tarde de lo previsto después que el autobús fuera bloqueado deliberadamente por manifestantes de Just Stop Oil, quienes argumentan que la crisis climática conducirá inevitablemente a más migración en todo el mundo.
Los críticos señalan que la barcaza, que tiene una capacidad para 504 personas, representa potencialmente un peligro de incendio y que las autoridades tratan a los residentes como si estuvieran en prisión.
“Lo odian: Dicen que se siente como una prisión, algunos odian estar en el mar, les resulta muy difícil salir y están completamente separados de la comunidad”, dijo Candy Udwin, del grupo Stand Up To Racism.
El Ministerio del Interior de Gran Bretaña dijo que el uso de embarcaciones es “un enfoque probado” para albergar a solicitantes de asilo en toda Europa, además de ofrecer una buena relación calidad-precio, una afirmación que es cuestionada por la organización sin fines de lucro Reclaim the Sea.
El Ministerio del Interior agregó que la barcaza podría abrir sus puertas nuevamente una vez que se completen las pruebas de detección de bacterias y se mejoren los protocolos de seguridad contra incendios.
“El número de personas a bordo aumentará gradualmente con más llegadas en los próximos días y meses, como parte de un enfoque gradual y cuidadosamente estructurado”, dijo un portavoz del departamento.
