MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
En el marco de un encuentro sobre estas enfermedades organizado por Europa Press, el médico del Servicio de Alergología en Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, Ismael García, ha explicado que estas patologías son "una serie de enfermedades multiorgánicas" entre las que se encuentran la dermatitis, la rinitis, el asma, la esofagitis eosinofílica y la rinosinusitis crónica con poliposis nasal.
Asimismo, el alergólogo ha argumentado que la inflamación tipo 2 ocurre en pacientes que están "genéticamente predispuestos". Generalmente, estas enfermedades suelen responder bien a corticoides tópicos, pero hay pacientes que "no tienen suficiente" con ello.
Por su parte, el doctor Raúl de Lucas, jefe de Sección de Dermatología Pediatrica del Hospital La Paz, ha explicado que la dermatitis atópica es "una de las primeras manifestaciones" de la inflamación TH2. "Esta inflamación de la piel viene determinada fundamentalmente por una alteración de la barrera cutánea determinada genéticamente. Muchas veces hay también una alteración genética que condiciona que nuestro sistema inmune esté hiperestimulado o no, o que el paso de irritantes y alérgenos lo estimule y eso se vaya perpetuando".
Además, en este tipo de patologías también existe una alteración de la microbiota. "Es una disbiosis que vemos cada vez más frecuentemente porque son pacientes con muchas complicaciones infecciosas y con problemas en este sentido", ha explicado
Por otro lado, el otorrinolaringólogo José Miguel Villacampa, del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, ha hablado sobre la rinitis alérgica y la poliposis nasal. "Aquí lo que hay es una desregulación de la inflamación. Se rompe la barrera epitelial que nos protege, lo que hace que diferentes alérgenos, diferentes virus, diferentes bacterias empiecen a afectar a nuestro sistema inmune", ha declarado.
Por su parte, la paciente la paciente Susana Cabañero, de la Asociación Española de Pacientes con Poliposis Nasal, ha lamentado la falta de entendimiento por parte de la sociedad. "Es una enfermedad que no se ve. Aparentemente no tenemos nada, solamente nos ven que tenemos mucha mucosidad, la voz tomada, pero en realidad no olemos. Muchas veces tenemos dolores de cabeza, no dormimos bien y tenemos dificultades para relacionarnos, porque siempre tenemos que ir con el pañuelo en la mano".
EL 40% DE LOS PACIENTES CON ASMA GRAVE TIENE POLIPOSIS NASAL
Estas enfermedades tienen un origen común, por lo que puede ocurrir que varias de estas enfermedades cursen al mismo tiempo. De hecho, aproximadamente el 40 por ciento de los pacientes con asma grave tienen poliposis nasal, siendo esta una de las asociaciones más frecuentes.
Precisamente, la poliposis es una de estas enfermedades para las que no está aprobado el uso de los nuevos tratamientos biológicos. "Hay muchos pacientes con poliposis en la asociación que están pasándolo mal y que han sufrido operaciones, pero no pueden todavía beneficiarse de esos medicamentos. Solamente cuando esos pacientes tienen otras enfermedades, como asma grave, pueden beneficiarse", ha explicado. "Desde la asociación queremos que todos los pacientes tengan acceso a esos medicamentos, incluso los que tienen solamente poliposis", ha añadido.
En este sentido, la paciente ha explicado cómo la enfermedad afectaba a su salud mental hasta la aparición de las innovaciones terapéuticas. "Pasé por dos operaciones, por corticoides, antibióticos y estuve casi un año enferma continuamente antes de ponerme los biológicos. Para mí fue muy duro porque no podía hacer nada, estaba siempre enferma, siempre tomando medicación y me encontraba muy mal. Para mí, los biológicos fueron como ver la luz de nuevo", ha detallado, aunque ha recordado la importancia de seguir tomando la medicación de base, como los corticoides orales.
"Aunque hay indicación a nivel europeo y a nivel americano de usar algunos biológicos y vemos que la experiencia y las publicaciones de que los pacientes tienen una mejoría muy importante, nosotros todavía no tenemos ese cambio", ha lamentado Villacampa, para insistir en que, si el paciente con poliposis no tiene otra enfermedad que justifique que le suministren ese biológico, tiene que volverse a operar, "habiendo un fármaco que lo evitaría". En este punto, ha recordado que los pacientes que han sido tratados con los biológicos por asma "mejoran mucho". Además, al haber un rechazo explícito, los pacientes con poliposis ni siquiera pueden beneficiarse de un uso compasivo.
En el ámbito de la dermatitis, De Lucas ha expresado que los médicos son "esclavos de la evidencia y de los protocolos"; si bien ha reconocido que, en dermatitis atópica grave, ha habido "un antes y un después", y, en concreto, en dermatitis atópica pediátrica. "Felizmente, ya tenemos tratamientos biológicos a partir de los 6 años y otro tipo de tratamientos a partir de los 12. Ahora mismo, el panorama es un panorama tremendamente esperanzador", ha celebrado.
En este sentido, Tania Nogués, madre de un niño con dermatitis atópica grave, ha manifestado que el inicio del tratamiento con biológicos ha supuesto un "cambio radical" para su hijo Noé, de cinco años, que padece dermatitis atópica grave. "Ahora dormimos, comemos, vamos a la piscinan y nos metemos en el mar", ha apuntado. En este caso, su hijo ni siquiera había llegado a la edad de los 6 años, que es cuando se tiene que empezar a administrar, por lo que tuvieron que acudir a tribunales médicos.
Finalmente, todos han coincido en la importancia de "trabajar de forma conjunta", de manera que varios especialistas pasen a la vez la consulta y vean al mismo paciente; así como de la necesidad de una mayor investigación para encontrar el origen de estas enfermedades. Llegar a la causa acercaría aun más la cura, ya que, hasta ahora, los biológicos solo permiten mejorar la inflamación.