BRUSELAS, 23 (EUROPA PRESS)
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha contestado este lunes a las críticas internas por su respuesta a la crisis en Oriente Próximo afirmando en una carta a los trabajadores de la Comisión Europea que Bruselas trabaja para aliviar el sufrimiento de "todos" los afectados por el conflicto y que Europa "siempre estará del lado de la humanidad y de los Derechos Humanos"
"Quiero asegurarles que Europa siempre estará del lado de la humanidad y de los derechos humanos. Colaboraremos con la comunidad internacional para garantizar el respeto del Derecho Internacional Humanitario. Estamos redoblando esfuerzos para proporcionar ayuda humanitaria de emergencia a los civiles afectados por esta guerra", apunta la misiva a la que ha tenido acceso Europa Press.
Después de que 800 trabajadores de la Comisión Europea criticaran en una carta la "indiferencia" por la muerte de civiles en la Franja de Gaza y pidieran que el Ejecutivo europeo defienda un alto el fuego humanitario y la asistencia de emergencia ante la crisis de desplazados en el enclave palestino, Von der Leyen ha señalado que el bloque no escatimará esfuerzos, para "contribuir a llevar la estabilidad y una paz duradera a la región, basada en la solución de los dos Estados", siguiendo la línea marcada por los Veintisiete.
En su carta, la conservadora alemana condena la matanza de Hamás de más de 1.400 personas en Israel así como la toma de más de 200 rehenes y señala que "al mismo tiempo" la Comisión "esta de luto por la pérdida de todas las vidas inocentes en este conflicto, de todas las confesiones y nacionalidades".
A lo largo de la misiva, Von der Leyen incide en su postura de solidarizarse con Israel, tras afirmar en el Parlamento Europeo que la petición de contención al Estado hebreo solo puede partir del reconocimiento de su dolor.
"Sé que muchos de ustedes están afectados por esta crisis a nivel personal. Entre las personas asesinadas o tomadas como rehenes por Hamás hay muchos ciudadanos europeos; quizá algunos de ustedes hayan perdido a seres queridos o teman por la seguridad de amigos o familiares tomados como rehenes", subraya.
Y concluye diciendo que "son tiempos difíciles para todos los europeos" independientemente de su credo, tras los atentados vividos en Bruselas y Arras, Francia. "Algunos pueden incluso sentirse intranquilos", reconoce.
