MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
La victoria de la exdiputada María Corina Machado en las elecciones primarias de la oposición venezolana ha marcado un punto de inflexión en la carrera hacia los comicios que teóricamente deben celebrarse en 2024, pero la inhabilitación dictada en junio para ocupar cargos públicos y las acusaciones de fraude vertidas en las últimas horas por los principales dirigentes chavistas, incluido el presidente Nicolás Maduro, ponen en entredicho el horizonte electoral de la líder de Vente Venezuela.
Machado arrasó en las primarias del domingo, según la Comisión Nacional de Primaria, que le atribuye más del 90 por ciento de los votos. Para Maduro, sin embargo, todo forma parte de un "megafraude" con el que la oposición quiere "volver a poner al país en la violencia, la guarimba y la desestabilización", en línea con las acusaciones vertidas en los últimos años.
La primera dama, Cilia Flores, ha alentado abiertamente en el programa de su marido por imputar a los responsables de este supuesto fraude, mientras que el 'número dos' del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, ha dejado claro que no se contempla ningún escenario en el que Machado pueda disputarse la Presidencia con Maduro en 2024. "No hay ni una sola posibilidad, pero ni media", ha zanjado.
Sin embargo, para el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma, coordinador del Consejo Político Internacional de Vente Venezuela, no cabe más horizonte que una candidatura unitaria de la oposición encabezada por Machado, a la que considera "legitimada" como abanderada de los principales partidos disidentes por los propios ciudadanos en una "hazaña cívica", como ha descrito el proceso concluido el domingo.
Sobre Machado pesa una orden de inhabilitación por 15 años dictada en junio por la Contraloría General a raíz de la petición de un diputado chavista y fundamentada, entre otras razones, en presuntas irregularidades de tipo administrativo y en su respaldo a las sanciones adoptadas sobre Venezuela.
Ledezma considera en cambio que el tema de la inhabilitación, una "ilegalidad que pretende ser barnizada de constitucional", se puede considerar a estas alturas "un capítulo cerrado". "La fuerza numérica y la contundencia de la hazaña le coloca una lápida a ese conjuro del régimen", ha esgrimido el dirigente opositor en una entrevista a Europa Press en la que también ha aludido al proceso de negociaciones abierto con el chavismo para tratar de llegar a algún tipo de acuerdo que garantice la transparencia de futuras elecciones.
La liberación de presos --la semana pasada cinco recuperaron la libertad-- y la celebración de elecciones libres son dos de los "puntos sobresalientes" en dichos contactos. "Unas elecciones libres sin Maria Corina Machado no son tal cosa", en palabras de Ledezma, que ha apelado de manera específica a la Unión Europea y a España para que lo tengan en cuenta a la hora de plantear un posible alivio de las sanciones contra Maduro, como ya ha hecho Estados Unidos en relación al sector petrolero.
Un portavoz del Departamento de Estado ha reconocido a Europa Press que la liberación de los cinco presos "es un primer paso importante" tras el principio de acuerdo entre la oposición y el Gobierno en Venezuela, pero al mismo tiempo ha reconocido que hacen falta más gestos. Washington espera que los avances sean cuestión de semanas, con finales de noviembre como plazo límite.
Así, tras la selección de "la candidata de la oposición democrática", en alusión a Machado, el portavoz ha señalado que ahora Caracas debe seguir avanzando para garantizar "unas elecciones presidenciales libres, justas y competitivas" en 2024, interrogado expresamente por el tema de la inhabilitación y el condicionamiento que puede suponer para la participación final de la ganadora de las primarias.
EL RIESGO A PERDER
El chavismo, por ahora, deja fuera el tema de la inhabilitación de los contactos en marcha. El presidente de la Asamblea Nacional y jefe de la delegación chavista en este diálogo, Jorge Rodríguez, ha dejado claro que los compromisos adquiridos establecen que "podrán ser candidatos quienes cumplan la ley", lo que 'de facto' implica descartar a políticos inhabilitados como Machado.
Un miembro de la delegación opositora ha admitido igualmente en privado las dudas en torno a una potencial revisión de las inhabilitaciones en vigor, en la medida en que estaría por ver "hasta qué punto el chavismo está dispuesto a arriesgarse a perder" en los futuros comicios. No en vano, las últimas veces que la oposición presentó un candidato común se quedó a menos de diez puntos (en 2013) y a 1,5 puntos (en 2012) del chavismo, en ambos casos de la mano de Henrique Capriles.
Ahora, tanto Capriles como otros símbolos opositores como Juan Guaidó se han posicionado ya detrás de Machado como candidata unitaria. "Hoy recibí un mandato y me comprometo a hacer valer ese mandato", declaró la vencedora en su primer discurso al cierre de las urnas, dispuesta a trabajar en los próximos meses para "desalojar" a Maduro y poner fin a la "tiranía" en el país sudamericano.