PARÍS (AP) — Inglaterra finalizó en el tercer puesto del Mundial de rugby por primera vez en la historia, el resistir las oleadas ofensivas de los argentinos en las postrimerías del encuentro e imponerse el viernes por 26-23.
Los Pumas revivieron en un encuentro que perdían por 13-0 y llegaron a tomar una ventaja de un punto después del descanso. Inglaterra respondió y se mantuvo apenas al frente gracias al botín del capitán Owen Farrell, quien fue abucheado de forma despiadada durante toda la noche.
En los últimos cinco minutos, los Pumas fallaron un penal que les habría permitido igualar el marcador. George Ford, sustituto de Inglaterra, logró un derribo de Mateo Carreras, con lo que evitó un try.
“Comenzamos el partido realmente bien, nos colocamos al frente, fuimos duros y logramos buenos avances, pero el partido no terminó siendo tan fácil”, dijo Farrell. “Argentina tuvo mucho que ver en ello. El encuentro fue bastante accidentado después. Tuvimos que pasar por mucho desgaste para lograr el triunfo”.
Argentina, que llegó a semifinales por tercera ocasión en un Mundial, no pudo emular el bronce de 2007, y repitió el cuarto sitio de 2015.
“Es duro aceptar esta derrota”, dijo el técnico Michael Cheika. “Es difícil sacar algo positivo, pero creo que que la trayectoria en este Mundial debe enorgullecer a los argentinos. Lo que nos falta es excelencia. La necesitamos, pero tenemos la capacidad para rebasar los obstáculos”.
