MANCHESTER (AP) — Mucho ha cambiado con el Tottenham desde que Mauricio Pochettino fue despedido este mes hace cuatro años.
El club está en su cuarto técnico desde entonces.
Pero por pura suerte, los Spurs encontraron al técnico Angel Postecoglou, quien ha envigorizado al club en tiempo récord y ha generado una sensación de bienestar que no se sentía desde la etapa de Pochettino.
El impacto del australiano desde su contratación al final de la campaña anterior ha desafiado cualquier expectativa. Pochettino regresa el lunes para enfrentar a su exequipo que tras 10 encuentros sigue sin perder en la cima de la Liga Premier.
Incluso los aficionados más optimistas no podrían haber soñado con un inicio tan impactante —especialmente tras la caótica etapa tras la partida de Pochettino.
Tras un periodo de estabilidad con Pochettino y la alegría que repartía pr el club que los llevó a disputar la final de la Liga de Campeones en el 2019, los Spurs vivieron un periodo turbulento intentando recuperar la magia.
La temporada pasada no lograron avanzar a la Liga de Campeones por primera vez desde el 2009 y los aficionados pidieron un cambio.
Postecoglou fue la persona a la que el presidente Daniel Levy, que estaba bajo presión, eligió. El australiano había ganado la tripleta con el Celtic de Escocia, pero cambiar la fortuna del equipo había sido demasiado para otros entrenadores más decorados.
Y lo tendría que hacer si el líder anotador Harry Kane, quien fue vendido este verano al Bayern Munich.
Esto hace más impresionantes sus logros. Ocho triunfos y dos empates en 10 encuentros de liga, que incluye duelos ante Arsenal, Liverpool y Manchester United.
Ahora se verá ante el Chelsea de Pochettino y el Tottenham está en la inusual posición de favorito.
Chelsea ha dominado recientemente este duelo. Su única derrota desde el 2018 ante el Tottenham ocurrió en febrero pasado.
Pero con nuevos dueños, el Chelsea está en medio de una reconstrucción que llevó al club a terminar con la menor cantidad de puntos la temporada pasada en la era de la Liga Premier. Tras gastar 1.000 millones de dólares, Chelsea parece dirigirse a otra campaña decepcionante.
EN CRISIS
Eirk ten Hag reconoce que debe asumir su responsabilidad por el deterioro del Manchester United. Una derrota ante Newcastle el miércoles puso fin a su defensa del título en la Copa de Liga y le propinó otro golpe al técnico. United ahora viaja el sábado para enfrentar al Fulham desesperado por una victoria tras sumar ocho derrotas en todas las competencias.
“Soy un luchador y estoy en la pelea y tengo que asumir la responsabilidad con los jugadores y que nos mantengamos juntos y peleemos juntos para obtener mejores resultados”, dijo el holandés.