MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, ha afirmado que los "principios" para un acuerdo de paz con Azerbaiyán han sido pactados, si bien ha achacado a la "desconfianza mutua" la imposibilidad de firmar un pacto que ponga fin al conflicto, que ha tenido en su epicentro a la región de Nagorno Karabaj.
"Si los principios de la paz con Azerbaiyán están acordados, ¿cuál es el problema?", se ha preguntado. "¿Por qué no avanzamos? ¿Por qué no firmamos un acuerdo de paz?", ha cuestionado Pashinián, según ha informado la agencia estatal armenia de noticias, Armenpress.
En este sentido, ha destacado que "el principal motivo es la desconfianza entre las partes". "Cada vez que vemos las afirmaciones y ciertas acciones de Azerbaiyán, y quizá cuando ellos ven las nuestras, sobre abandonar acuerdos y planificar acciones agresivas, impacta negativamente sobre el trabajo en el texto para un acuerdo de paz", ha agregado.
Pashinián ha apuntado sin embargo que aún quedan asuntos por aclarar de cara a la firma de un acuerdo de paz y ha reconocido que "la realidad es que, a veces, cada frase puede ser interpretada de forma diferente, por lo que hay que tener interpretaciones claras sobre cómo superarlo en caso de interpretaciones enfrentadas".
"El otro asunto es la creación de garantías de seguridad para que no sea posible que haya una escalada tras la firma del tratado de paz", ha dicho, al tiempo que ha hecho hincapié en que las autoridades armenias trabajan para intentar impulsar la vía diplomática con Bakú.
Por otra parte, ha desvelado que el gasto en defensa en los Presupuestos para 2024 duplicará la cifra contemplada en 2018, si bien ha insistido en que "no es una preparación para la guerra, sino una preparación para la paz". "Proteger a nuestros ciudadanos es la garantía más importante de paz y estabilidad", ha argüido.
"Estoy convencido de que todos los países vecinos están seguros de que no pretendemos atacar a nadie", ha puntualizado, al tiempo que ha defendido que "todo Estado soberano tiene no sólo el derecho, sino también la obligación, de reformar y fortalecer su Ejército".
"Es algo que estamos haciendo", ha dicho Pashinián, quien ha recordado que "durante la última década, el gasto en defensa de Azerbaiyán fue, de media, tres veces superior" al de Armenia. "Básicamente, eso sigue siendo así", ha zanjado el primer ministro armenio.
El propio Pashinián dijo a finales de octubre que esperaba lograr un acuerdo de paz "en los próximos meses", antes de indicar que el mismo pasa por el reconocimiento de la integridad territorial de ambos y con las fronteras fijadas a raíz de una declaración de 1991.
Las palabras del primer ministro armenio llegaron semanas después de que Azerbaiyán lograra la reintegración de Nagorno Karabaj, de mayoría armenia, que había estado más de tres décadas bajo control de fuerzas proarmenias pese a que la comunidad internacional reconocía la región como de soberanía azerí.
Las autoridades de Armenia indicaron tras ello que más de dos tercios de la población armenia de Nagorno Karabaj huyó de la región tras la ofensiva azerí y denunció una "limpieza étnica", algo que ha sido desmentido desde Bakú, que asegura que respeta los derechos de esta minoría étnica en el país euroasiático.